24/08/2011

El mundo

En Alemania una mujer sufre en carne propia un "Juego del miedo" real

Un secuestrador convirtió una vieja cabina de teléfono en celda insonorizada donde mantuvo cautiva a la joven. Consiguió escapar gracias a un descuido de su captor.

Una mujer israelí de 26 años consiguió escapar de un sádico que pretendía torturarla. La víctima, que no ha sido identificada, permaneció encerrada en una estrecha cabina telefónica adaptada como cámara de castigo durante horas después de ser secuestrada en una calle de Hamburgo, Alemania por un hombre al que apenas acababa de conocer.

Thomas Fisher de 30 años secuestró a la joven y la trasladó a su apartamento habilitado como una gran cámara de tortura. En una de las dos habitaciones la policía encontró una cabina telefónica modificada, donde la mujer estuvo encerrada, según publica 'The Guardian' .
 
La parte exterior de las ventanas estaban atravesadas con alambre de púas y sellado en el interior con papel de aluminio y film transparente .
 
 La chica, que estaba esposada, consiguió escapar gracias a un descuido de su captor que olvidó cerrar la puerta de la cabina. Avisó a la policía y este ocupó la casa y detuvo al secuestrardor.
 
En el registro que realizaron los agentes, también encontraron instrumentos ginecológicos, así como bisturís, agujas y pinzas.
 
El hombre había modificado los extintores para que funcionaran como bombas. El fiscal encargado del caso, Wilhelm Mollers, aseguró que era evidente que "el apartamento fue concebido como un lugar de confinamiento".
 
La joven secuestrada había conocido a Fisher a través de un amigo que los presentó, pero no había ninguna relación entre ellos. Al parecer, el hombre, con un perfil sádico, se obsesionó con ella.
 
La policía informó que Fisher había sido acusado en varias ocasiones por acoso, aunque los cargos nunca prosperaron .
 
 
 



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