Los bussistas dicen que los Montoneros los hicieron desaparecer

El abogado Pablo Calvetti, quien encabezaba la lista de diputados nacionales de Fuerza Republicana, emitió un comunicado en el que acusa al gobierno de "usar el fraude para tomar venganza con los bussistas". La afirmación de Calvetti tuvo lugar al conocerse que el partido que fuera fundado por Antonio Bussi, condenado a prisión perpetua por genocida, no había alcanzado el 1,5% de los votos que la ley obliga a tener como mínimo para participar de las elecciones.

Según el escrutinio provisorio, los bussistas habían obtenido el 1,68% de los votos, pero en el recuento definitivo ese porcentaje quedó en el 1,45%.

El comunicado de Calvetti dice textualmente:
 
“Una vez más, como le paso a Ricardo Bussi en 1999, Fuerza Republicana se acuesta con un triunfo electoral y amanece con los resultados cambiados.

Luego de que el escrutinio provisorio nos diera superando el piso de las internas primarias holgadamente, ahora nos comunican que, de la noche a la mañana, no podemos participar porque todos los resultados publicados por la mismísima pagina oficial de la Justicia Electoral, por todos los medios y ratificada por todos los candidatos, a última hora cambiaron y, la tercera fuerza política de la provincia, no puede participar de las elecciones nacionales del 23 de octubre.

No sólo es una vergüenza inconstitucional sino que ratifica las denuncias de fraude que vienen sosteniendo todos los candidatos de la oposición. Es una maniobra mas tendientes a dejar afuera al Partido del Gral. Antonio D. Bussi. No nos quieren en el Parlamento porque no quieren oír la verdad, quieren sancionar el aborto y que nadie les grite “asesinos!”; quieren destruir la familia cristiana sin escucharme para no manchar su conciencia.

Esta es una maniobra directa de Horacio Vertvisky y los Montoneros del poder pues me reconocen como su principal enemigo. Nosotros recurriremos la medida y llegaremos hasta la Corte Suprema de Justicia si es necesario. Al menos los obligaremos a mentir en todas las instancias.

Esto es inconstitucional.

Una ley no puede cercenar un derecho so pretexto de reglamentarlo y además todo el proceso electoral resulta tremendamente sospechoso. No sólo usaron el fraude para llegar al 50 % de los votos que se auto adjudica la Presidenta sino también para tomar venganza con los bussistas. Esto no es Democracia, a lo sumo, tiranía chavista.”

Pablo Roberto Calvetti.