14/10/2011
Argentina
El criminal Astiz ahora dice que es víctima de una persecución política
El represor concluyó su alegato calificando al proceso judicial en su contra como un "linchamiento". Le entregó una Constitución a los jueces.
Alfredo Astiz, ex marino y uno de los integrantes de los grupos de tareas que funcionaron en la Escuela de Mecánica de la Armada durante la última dictadura militar, acusado de participar del secuestro y desaparición de Azucena Villaflor, las monjas francesas y Dagmar Hagelin, concluyó su alegato calificando el juicio, en el que probablemente sea condenado a cadena perpetua, como "un acto de linchamiento". En un último gesto de provocación se acercó a los miembros del Tribunal Oral Federal 5 y les entregó un ejemplar de la Constitución Nacional.
Al entregar el ejemplar de la Carta Magna, le pidió a los magistrados Daniel Obligado, Ricardo Farías y Germán Castelli que se lo hicieran llegar a la Corte Suprema. La insólita actitud tuvo lugar luego de que dijera sus “últimas palabras”, durante las cuales afirmó que el proceso en su contra "no es justicia".
Las "últimas palabras" es la instancia del juicio en que cualquier acusado puede exponer las razones de su inocencia que pudieran no haberse vertido antes, aunque también pueden rechazar ese beneficio y optar por el silencio.
Astiz y otros 17 acusados se los imputa crímenes de lesa humanidad cometidos en la ex Escuela Mecánica de la Armada durante la última dictadura, entre ellos la desaparición y homicidio del grupo fundador de Madres de Plaza de Mayo, las dos monjas francesas y el periodista Rodolfo Walsh.
