La pregunta que Fede Bal prefirió no contestar: "hablemos de otra cosa"

Un año y dos meses de amor con un final escandalosos: Federico Bal (26) y Barbie Vélez (21) le pusieron punto final a su relación con graves acusaciones cruzadas: ella lo denunció ante la Justicia por violencia de género, y él por lesiones y daños a su hogar.

En ese marco, el hijo de Carmen Barbieri y Santiago Bal fue a Intrusos para explicar su explosiva ruptura y afrontó todo tipo de preguntas. Sin embargo, una lo sorprendió y la respondió con pocas palabras y un silencio que dijo mucho. "¿En algún momento Barbie se lastimaba sola y después gritaba 'no me pegues'?", indagó Daniel Ambrosino. Y Federico contestó con seriedad: "Hablemos de otra cosa, por favor. No voy a decir más nada de estas cosas".

Pero esa no fue la única pregunta fuerte: Marcela Tauro quiso saber si en una de sus reiteradas peleas apareció un cuchillo. Y el testimonio del actor fue estremecedor: "Hubo un episodio (el del cuchillo) muy violento, donde dije 'esto ya está, esto termina en homicidio'. Y no por parte mía… ¿Cómo suceden los homicidios no premeditados? Una mujer loca o un tipo agarraron un cuchillo y te mata. Y dije 'no'. No digo que haya pasado eso. Sólo quiero decir que hubo un episodio de violencia extrema hacia mí. La llamé a Nazarena y le dije 'no puedo más'. Era una época en la que Barbie me encerraba. Me sacaba mi celular, mis llaves del auto por si me querían ir y se encerraba en el cuarto con todo eso adentro. Me dejaba en el living y no podía abrir".

A continuación, las declaraciones más significativas del paso de Fede Bal por Intrusos:

-"Nunca en la vida le pegué. No la zamarreé. Frené lo que estaba pasando esa madrugada en mi casa. Intenté agarrarla. Frené el ataque. El moretón es de un agarre… Me da mucha vergüenza estar acá, pero no me dejó otra salida. Ella fue la que eligió hacer la tapa de Gente, dejando entrever lo del moretón".

-"Me están acusando de algo que no soy, nadie sabe el infirmo que yo estaba viviendo, lo que fueron las últimas semanas. Lo que me callé por cuidarla y cuidarme. Yo me enamoré perdidamente de una mujer hermosa, con una personalidad tremenda, con proyectos, con talento, que me hizo ver cosas del amor que no tenía pensado. Me hizo querer construir una familia con ella, querer tener hijos, casarme. Yo era un vago, era un bardo y ella me puso en línea. Hoy lo veo como una dominación. En su momento lo veía como algo que debía ser. El problema está en normalizar los celos enfermizos, el sentir que yo te puedo privar hacer ciertas cosas, controlarte, y se nos fue las manos".

-"Elegí esa mujer y esa mujer vino con un montón de cosas hermosas, y otras durísimas. Las discusiones nuestras empezaban y nosotros no nos acordábamos por qué. Normalizábamos el grito, la pelea. Eso se había hecho habitual. Mi consejo es no normalizar esto. No tenés que tener el código del celular de tu mujer, no le tenés que prohibir ir a una previa... ".

-"Hubo una discusión muy grande donde Barbie me rompe un Whisky y una puerta. Entra en crisis, yo la agarraba, y le decía 'no grites, tengo vecinos, por favor, no'. La agarraba, la ponía en la cama, pero nunca le levante la mano, ni un cachetazo, ni una trompada le di".

-"Ella no toma medicación, no voy a decir cosas que no son para embarrar a Bárbara. Son celos. Siempre hubo distintos motivos y por momentos mi casa era un caos. Yo veía la casa toda explotada y muchas veces barajaba la posibilidad de separarnos. Pero era más locura. Después de las discusiones muchas veces terminábamos en la cama, y con mucho amor, pero hace tiempo que yo me tendría que haber separado de ella y ella de mí. Normalizamos todo. Teníamos una relación adictiva".

-"Yo no la hubiese denunciado nunca a esta mujer, pero ella hizo esta tapa. Yo sólo le dije a 'Barbie no me rompas las cosas'. Ella abrió la puerta y yo tengo que hablar. No me va a arruinar mi carrera ni mi vida. Me dio los mejores momentos y ahora me da los peores".

-"Con Bárbara no vuelo nunca más. La amo, completamente. Pero nunca más. Ya está".