Murió aplastado por un elefante "en venganza" por su cacería

Theunis Botha, de 51 años, era uno de los fundadores de los conocidos Theunis Botha Big Game Hound Safaris. El suceso tuvo lugar el pasado viernes después de que el grupo con el que se encontraba la víctima se topara con una hembra de elefante y sus crías.

El cazador sudafricano trató de detener una embestida de estos animales disparando a tres de las crías, cuando un cuarto animal le envolvió con la trompa y le levantó unos metros del suelo. En ese momento, un integrante de la expedición intervino para salvar a su compañero abriendo fuego contra ese elefante, que cayó encima de Botha provocándole la muerte.

Natural de Tzaneen, en el norte de Sudáfrica, Botha era propietario de la empresa Game Hound Safaris , especializada en cacerías con perros de leopardos y leones.

Botha fue pionero en Sudáfrica de la caza de montería, una modalidad originada en la Baja Edad Media en Europa en la que los cazadores son guiados por perros hasta sus presas. Botha era, según la web, "un apasionado y un profesional de la caza outfitter centrado en dar a sus clientes una experiencia única en un safari africano".

Tras enterarse de la muerte de Botha, sus amigos y allegados lo despidieron en Facebook. Lo describieron como "una leyenda" y como "un gran hombre", además de enviarle condolencias a su familia. Sin embargo, algunos proteccionistas de animales aprovecharon la situación para criticarlo y comentaron: "Deberían estar llorando por el elefante".