La presidencia de la Cámara de Diputados giró al Senado de la Nación el proyecto de ley de movilidad jubilatoria que ya cuenta con media sanción. El oficialismo se prepara para que, tras el tratamiento de la Ley de Bases, comience el debate.
El resultado de la votación en la Cámara Baja indica que La Libertad Avanza no tendrá posibilidades de frenarlo y, si el presidente Javier Milei cumple su palabra y lo veta, la sesión en la que sea aprobado será el preludio de un fuerte enfrentamiento entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo.
El Ejecutivo tiene a su favor los plazos. Primero, esta semana hay sesión, así que es poco probable que la presidenta del cuerpo, Victoria Villarruel, gire el proyecto a las comisiones que deben analizarlo. La próxima semana hay tres feriados -lunes, jueves y viernes-, lo que hace poco probable el llamado a comisiones, por lo que todo estaría dispuesto para la última semana de junio.
Si la intención del oficialismo es dilatar, puede organizar reuniones informativas, convocar a expertos y así extender los plazos. Las comisiones donde se debatirá el proyecto serían las de Presupuesto y Hacienda, presidida por el senador jujeño de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche, y la de Trabajo y Previsión Social, encabezada por la senadora del Pro, Carmen Álvarez Rivero (Córdoba).
Pero una vez que pase esa instancia, irá al recinto y las cuentas muestran que recibiría un amplio apoyo, teniendo en cuenta cómo se votó en Diputados. El bloque de Unión por la Patria aportará 33 votos a favor, y el de la UCR -autor del proyecto- aportará otros 13. Solo con estos dos bloques se asegura la sanción con 46 votos -necesita 37 para tener la mitad más uno-.
Sin embargo, podría avanzar y obtener los dos tercios, ya que, siguiendo el razonamiento de lo que sucedió en la Cámara Baja, los misioneros del Frente para la Concordia -Carlos Arce y Sonia Rojas Decut-, los del bloque Por Santa Cruz -José María Carambia y Natalia Gadano- y la senadora Mónica Silva, que responde al gobernador de Río Negro, Alberto Weretilnek, también lo apoyarían, lo que daría un total de 51 votos a favor. Más los tres senadores de Unidad Federal -Carlos Espínola, Edgardo Kueider y Alejandra Vigo- sumarían 54, superando ampliamente los dos tercios de la Cámara.
La oposición a la norma quedaría en los 7 senadores de La Libertad Avanza, y hay dudas sobre si los 6 senadores del PRO la apoyarían. En Diputados, y con la idea de no votar en contra, algunos se ausentaron al momento de la votación.
El resultado prevé un enfrentamiento entre el Poder Legislativo y el Ejecutivo. El Presidente de la Nación ya dijo que iba a vetar la ley e hizo referencia a los diputados que la votaron llamándolos “degenerados fiscales”. Asimismo, el oficialismo argumenta que la norma atenta contra el programa económico del Ejecutivo porque tiene un costo fiscal del 0,45% del PBI.
Por su parte, los radicales criticaron esa postura -incluso algunos criticaron al ex presidente Mauricio Macri, quien se mostró en línea con Milei- y amenazan con avanzar nuevamente con la norma si el Ejecutivo la veta, apoyándose en los dos tercios de ambas cámaras y, en su defecto, profundizar el enfrentamiento.
“Podemos avanzar con vetar el DNU que estableció esta fórmula o llamar a una consulta popular, algo que, de suceder, el Presidente no puede vetar”, dijo uno de los operadores del bloque en la Cámara de Diputados frente a la amenaza de Milei.