Este jueves, la Iglesia llevó adelante su celebración por el día de San Cayetano, de la mano del arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva. La autoridad eclesiástica lanzó una fuerte crítica contra el Gobierno nacional por los vetos a los proyectos jubilatorios y de emergencia por discapacidad. Asimismo, pidió que las autoridades no abandonen a los sectores vulnerables en este complicado contexto económico del país.
Tajante mensaje contra el Gobierno de Milei
Días después de la marcha de jubilados y de las organizaciones que aúnan a las personas con discapacidad, el monseñor Jorge García Cueva envió un tajante mensaje con gran contenido político y social. Esta opinión también llegó en medio de un clima de tensión por los vetos presidenciales a los proyectos de la oposición y de los reclamos de múltiples sectores sociales por los recortes presupuestarios.
Por este motivo, las palabras de la autoridad de la Iglesia católica argentina toman mayor fuerza. “No podemos desentendernos de los jubilados ni de las personas con discapacidad”, manifestó el prelado ante la multitud presente. De esta forma, marca su posición en contra de la controversial política económica empleada por la administración de Javier Milei y la forma de gobernar a través de los vetos.
Siguiendo la misma línea, pidió que el Estado tome el papel de “custodio y guardián” de la vida del pueblo. “De los más pobres, de los más débiles, de los nacionales que siguen esperando una jubilación digna. Somos custodios de las personas con discapacidad y los enfermos”, aseveró. Para García Cuerva, resulta fundamental no desentenderse de la difícil situación de algunas personas. Puso de ejemplo a los que revuelven la basura en busca de algo para comer. “Lo hacen por necesidad”, enfatizó.
Un llamado a la paz y a la reconciliación
Otro tramo de la homilía fue utilizado por el monseñor para pedirles a todos que terminen con la violencia verbal y construir una convivencia basada en el respeto. En su oración, pidió que la Argentina se convierta en “una casa de reconciliación”. “Dejemos de descalificarnos, de odiarnos, de tratarnos mal. Dejemos de lado las palabras que lastiman mucho”, manifestó la autoridad eclesiástica.
Para respaldar esta solicitud, utilizó una frase del papa León XIV: “La paz comienza por cada uno de nosotros, por el modo en el que miramos a los demás, escuchamos a los demás y hablamos de los demás”. El jefe de la Iglesia resaltó la importancia de la comunicación en medio de este escenario cargado de tensión. “Debemos decir ‘no’ a la guerra de las palabras y de las imágenes”, sentenció.
Este último pedido fue un mensaje directo al desafiante discurso utilizado por el oficialismo y la oposición para debatir sus ideas. Incluso el mismo presidente usa palabras muy subidas de tono para hablar de los demás sectores políticos. Por ello, el arzobispo pide replantearse esta forma de debate y transformarlo en algo mucho más productivo y que cierre esta grieta discursiva que divide a los que piensan diferente.
La posición de la Iglesia frente a las medidas de Milei
La homilía del monseñor García Cuerva se suman a una línea discursiva que la Iglesia ya viene mostrando desde hace varios meses frente a la política de Javier Milei. En todas las oportunidades que se pronunciaron al respecto, pusieron el foco en la necesidad de los sectores más golpeados por los recortes realizados por el Gobierno y por la crisis económica que azota a gran parte del país. Pero ahora, el discurso fue mucho más contundente, directo, y tuvo lugar después de la derrota de la administración libertaria en el Congreso.