La cúpula de la Confederación General del Trabajo (CGT) formalizó su disconformidad con el nuevo monto del salario mínimo, vital y móvil mediante un comunicado en redes sociales. La histórica agrupación tildó a la cifra valorada como adecuada por el gobierno de Javier Milei como “desconectada” de la realidad socioeconómica.
Una nueva polémica se abre entre los representantes de la clase trabajadora argentina y la gestión libertaria, luego de que los funcionarios del león establecieran como piso de ganancia salarial el valor de 328 400 pesos y oficializaran la decisión mediante una publicación en el Boletín Oficial.
En estas circunstancias, se amplían las diferencias preexistentes entre ambos bandos, que previamente se vieron envueltos en el debate en torno a la reforma laboral, proyecto que La Libertad Avanza defenderá, con uñas y dientes, en ambas cámaras del Congreso de la Nación.
El comunicado del gobierno
Este martes, a semanas de culminar el 2025, el gobierno nacional anunció cuál será el salario mínimo aceptable que comenzará a regir, desde este mes, en el esquema laboral. Y, alegando la falta de acuerdos en las reuniones entre el Consejo Nacional del Empleo y la Comisión de Salario Mínimo, el Ejecutivo se responsabilizó de tomar la decisión.
Según detalla lo informado en la resolución 9/2025, emitida el 2 de diciembre, ambas entidades fueron convocadas a mantener un intercambio para resolver cuál sería la cifra estimada que comenzaría a regir como salario mínimo el 26 de noviembre pasado.
Y, sin embargo, no arribaron a ningún acuerdo entre los representantes del sector empleador y de los trabajadores, por lo que la determinación recayó en la voluntad de Claudia Silvana Testa, presidente del Consejo Nacional del Empleo, que estableció un incremento de apenas 6000 pesos, vigente desde noviembre.
En estas condiciones, el salario, que antes de la fecha correspondía a 322 200 pesos, alcanzó el tope de 328 400 pesos, dejando el valor hora en 1642 para los trabajadores jornalizados. Aunque, cabe destacar, el laudo también determina incrementos progresivos de carácter mensual.
Por lo que detalla que, en diciembre, la cifra llegará a 334 800, con un valor de hora establecido en 1674. Y el mismo patrón se repite desde el mes de enero de 2026 en adelante, hasta llegar a agosto, donde está previsto que el piso sea 376 600, a 1883 la hora.
La reacción de la CGT
Como responsable de hacer cumplir y velar por los derechos de los trabajadores, la CGT no tardó en emitir su juicio sobre el reciente veredicto, expresando el rechazo por la decisión de Testa, argumentando que el valor establecido no refleja las necesidades económicas que enfrenta la clase obrera.
Vía X, el organismo compartió con el país un comunicado formal, firmado por su consejo directivo, en el que tilda el monto estipulado como “insuficiente y desconectado de la realidad socioeconómica” del país. Asimismo, comenta su propuesta, presentada en las fallidas reuniones del Consejo, como la alternativa idónea para recuperar el porcentaje de ganancia que perdieron los trabajadores con la inflación.
“Nuestra propuesta contemplaba restablecer el poder adquisitivo perdido desde noviembre de 2023, incorporando además la inflación proyectada hasta abril de 2026”, detallaron. En términos estadísticos, la alternativa de la CGT sostenía un aumento acumulado de 71,6% en tramos del 11,4% mensual.
Un monto distante de la Canasta Básica
Además, desde la organización descalificaron la definición final por desconocer las “necesidades básicas de milloner de trabajadores y trabajadoras” y por atentar contra el derecho de los mismos a acceder a condiciones de vida digna dentro del sistema capitalista.
“Por ello, la CGT ratifica su reclamo para que el SMVM recupere definitivamente su valor (…) y permita reconstruir el poder de compra perdido desde noviembre de 2023”, expresan en las líneas finales. Pues, según informaron, la canasta básica, que hoy asciende a 1 176 852 pesos, es imposible de cubrir con el sueldo mínimo considerado por el gobierno.