No todo es color de rosas para los campeones del mundo con la selección argentina. Y es que hay dos futbolistas que levantaron el trofeo del Mundial 2022 disputado en Qatar que podrían estar en problemas legales por un escándalo que escala cada día más. Siendo dos de los tantos involucrados, los argentinos forman parte de un drama amplio vinculado a acciones ilegales durante los últimos años. La investigación ―reseñada por medios como La Nación o Diario AS― cayó en manos de la justicia y los problemas están a la vista por lo expuesto en los últimos días.
En problemas por un insólito caso: la selección en el foco
Tras un efecto dominó que involucra a una decena de futbolistas que disputaron o disputan el torneo de la Serie A, la liga italiana, son dos los argentinos que caen en la acusación por estar, indirecta o directamente, vinculados a estas acciones ilegales que tanto escándalo causan a nivel mundial. En Turín, la investigación tomó importancia y repercusión nacional. Uno de los primeros medios en publicar la noticia fue el Corriere della Sera, y de ahí ha saltado a todo el planeta.
Tras vincular al mediocampista a estos casos tan graves, la Federación Italiana de Fútbol decidió tomar cartas en el asunto para romper la gran red que pone en riesgo la competitividad del fútbol en este país. Allí, con un sistema organizado y lazos que complican a varios grandes nombres dentro y fuera de las canchas, los millones de euros apostados serían el problema central para los dos futbolistas que fueron dirigidos por Scaloni.
La trama y los problemas a la vista
Se trata de Ángel Di María y Leandro Paredes, los futbolistas que militaban en aquel momento, entre 2021 y 2023, en la Juventus. Según lo expuesto por los medios italianos, una cifra cercana a los 2 millones de euros fueron transaccionados por apuestas ilegales y deudas en esta modalidad. Tras la detención de Tonali y el arresto domiciliario a joyeros involucrados directamente, los futbolistas argentinos son solo dos de los diez nuevos acusados.
Entre los cargos de lo que se lo acusa está el de jugar póker en plataformas que no están legalizadas y por apostar en deportes. Sin embargo, los datos arrojan que la acusación estaría alejada de las apuestas en partidos de sus propios equipos, sino en un accionar ilegal en otras disciplinas lejanas al fútbol. Los nombres más llamativos en la lista son Álvaro Morata, Nicolo Zaniolo, Alessandro Florenzi, Weston McKennie y los nombrados Paredes y Di María.
A través de varias investigaciones, se logró conseguir la información necesaria de cómo funcionaba la maquinaria de apuestas ilegales para el lavado de dinero por parte de futbolistas en colaboración con los joyeros. Según los datos, los presuntos involucrados utilizaban el concepto de compra de joyería en sus transferencias, que finalmente eran destinadas al juego. Con esto, la evasión fiscal entra en foco, además de la utilización de plataformas fuera de la ley.
El descargo de Paredes y Di María
Los futbolistas campeones del mundo con la selección argentina ya dieron su descargo a través de las redes sociales. Negando categóricamente su relación con estas acusaciones que los vinculan a delitos durante su estadía en la Juventus. En Instagram, tanto Leandro Paredes como Ángel Di María, este segundo hoy en el Benfica de Portugal, decidieron lanzar un comunicado desmintiendo su participación en el caso.
La red de acusaciones parece ser todavía más grande y la justicia italiana pondrá cartas en el asunto. Sin imputación todavía firme y una investigación que recién comienza, el caso parece ser todavía más profundo. El futuro de los argentinos está por verse, pero esperan salir inocentes en la polémica de apuestas deportivas que tanto dolo de cabeza están trayendo. Paredes, por su parte, tiene en mente al Mundial 2026, como muchos de los campeones defensores.