Existen joyas guardadas que aun no conocemos en las grandes profundidades. Mientras que el país está mirando el fondo del Mar Argentino a través de la transmisión en vivo del CONICET, hay otras profundidades que reclaman atención. Bajo el suelo argentino hay un tesoro dormido hace más de 20 años. Con esto se puede producir la poderosa energía amarilla. Argentina está haciendo todo lo posible para sacarle el provecho al máximo. Además, expertos aseguran que estamos en el mejor momento.
En el momento justo, reaparece la energía amarilla
La vida tal como la conocemos se está transformando rápidamente. El avance tecnológico como una flecha atraviesa el corazón de todas las áreas sin dejar nada afuera. En este sentido, la inteligencia artificial es la gran protagonista del último tiempo. Con su enorme capacidad para automatizar tareas y analizar cantidades gigantescas de datos en segundos, parece tener una solución para todo. Además, puede aprender.
Sin dudas, las características de la IA hacen pensar que es imparable. Pero no es tan así. En principio, todavía queda mucho por mejorar. En esta dirección, un punto importante es cómo alimentarla. Esta poderosa herramienta requiere del funcionamiento de grandes centros de datos con servidores y sistemas de refrigeración. Estos consumen gigantescas cantidades de electricidad. Mientras el mundo se está volviendo loco para resolver esto, Argentina encontró algo.
Además, este hallazgo llega en el momento justo. Dado que el mundo empezó a mirar con otros ojos la energía nuclear. De la mano de importantes cambios geopolíticos y la gigantesca demanda de energía, la nuclear parece una opción más que atractiva y está resurgiendo. Para esto Argentina tiene para ofrecer 34 000 toneladas de un mineral clave. La Secretaría de Minería confirman que ya hay más de 15 proyectos confirmados a nivel nacional.
Un poderoso motor energético
Una vez más, la minería está ganando espacio y promete un futuro de riqueza para la Argentina. En este caso, van por un mineral que ahora todos quieren. Se trata del uranio que está tomado cada vez más protagonismo. Con esto se podría responder la demanda de la gran IA a pesar de lo que dicen. Al día de hoy existen 17 proyectos nacionales en provincias como Mendoza, Río Negro y Chubut principalmente.
El uranio representa un poderoso motor energético fundamental para la producción de energía nuclear. Dado que funciona como una especie de combustible para este tipo de reactores particulares. Por su parte, las reservas argentinas tienen un gran potencial que aun no se explotó. Ya que las comparan por su calidad con una de las más importantes en el planeta como las de Kazajistán. En esta dirección, Argentina viene acelerando para hacerse un lugar.
De a poco el Plan Nuclear Argentino va tomando forma. Ahora hay un proyecto en marcha que promete darle forma. Se trata de la creación de YPF Nuclear que comenzará a impulsar las iniciativas necesaria. Desde la construcción del primer reactor modular argentino hasta el desarrollo de la minería de uranio. Con esto se apunta a ir rumbo a un posicionamiento del país como un exportador estratégico de energía.
Desafíos importantes y polémica
Sin dudas, estamos encaminados hacia la energía amarilla que podría brotar en cualquier momento. Pero todavía falta. Por el momento los proyectos de uranio se encuentran en etapas preliminares por lo que ninguno de los 17 está activo en producción. Además existen importantes desafíos para llevarlo adelante. Desde cuestiones ambientales, sociales hasta técnicas y económicas.
Por otra parte, a esto se suma un clima de descontento y una la polémica a partir del anuncio del Plan Nuclear. Dado que al mismo tiempo se avanzó con el desfinanciamiento total del minireactor del vanguardia Carem 25, que venía construyéndose desde el 2007. La justificación fue que no era rentable, según el gobierno. Además, persiste cierta desconfianza por la gestión de esta energía, por ejemplo ¿Cómo se resolverán sus residuos? Argentina es novata en esta energía por eso para cuando brote debe evitar errores ajenos.