Algo está sucediendo en Argentina para que esté logrando lo que en otros países todavía no se ha podido. Se trata de un antes y un después en el sistema energético, donde las energías renovables no frenan. Es más, han alcanzado su mayor participación histórica en el sistema eléctrico. La energía eólica y solar han hecho avanzar significativamente a las fuentes renovables para que llegaran al 25,6% de la demanda en octubre. Bajo este marco, el Gobierno mandó un proyecto para ampliar la vigencia de la Ley 27 191.
El lugar de las renovables en Argentina
Tras comunicarse que Alemania apuesta por algo diferente, el foco del sector se ha posicionado sobre Argentina y el lugar que ocupan en ella las renovables. Producto del avance en la instalación de parques eólicos y solar de los últimos años, la producción eléctrica de fuentes renovables encuadrada en la Ley 27 191 cubrió en octubre un cuarto de la demanda total y sentó un récord en Argentina.
El pasado mes de octubre, el 25,6% de la demanda recibió abastecimiento por parte de la energía eólica (18%), solar (5%), biomasa (0,09%), biogás (0,4%) e hidráulica de represas de menos de 50 megawatts (MW), con 1,3%. De esta manera, rebasó el récord de septiembre, cuando las energías renovables supusieron el 22,4% sobre el total.
Si bien la producción hidráulica corresponde a una fuente limpia y renovable, las centrales de este tipo que registran una capacidad instalada superior a 50 MW (como Yacyretá y las represas del Comahue) no se contemplan en la Ley 27 191, que en 2015 determinó el régimen de fomento para el empleo de renovables. Esta medida responde al hecho de que los proyectos hidroeléctricos de gran escala tienen a reportar un considerable impacto ambiental.
Si incorporamos al cómputo estas represas, según consigna La Nación, las fuentes renovables llegaron en octubre al 53,1% de la demanda total, con 5617 GWh. De esa cifra, la energía eólica brindó GWh la solar 568 GWh.
¿Qué está pasando detrás del impulso de la energía eólica en Argentina?
La logística tras el impulso a la energía eólica en Argentina es uno de los grandes alicientes de su crecimiento. Debido a la expansión de los proyectos renovables, la logística ha pasado a ser un elemento clave para el óptimo funcionamiento de ellos, especialmente de los parques eólicos del país. Está presente en varias fases del proceso: desde la importación de piezas sobredimensionadas hasta la coordinación del transporte marítimo y terrestre.
En esta línea, Infobae recopiló las declaraciones de Rocío Cavallo, analista de abastecimiento en una compañía energética. La profesional destacó la importancia de que cada etapa esté “perfectamente sincronizada”. Respecto al momento presente de la energía eólica en Argentina, Cavallo advirtió que “hoy el sector está más quieto que en años anteriores”. En la actualidad, no existirían tantos proyectos como en tamaño.
Sin embargo, “también hay señales positivas”. Menciona el avance de la inteligencia artificial y las nuevas tecnologías. Dos escenarios que incentivan la demanda de energía renovable tanto en Argentina como en el resto del mundo.
Cómo es la logística de la energía eólica en Argentina
Rocío Cavallo expuso que la situación de Argentina aún dista mucho de lo que se vislumbra en Estados Unidos, Europa o Asia. “La cantidad de turbinas por parque allá es muy superior a lo que tenemos en América Latina. Por eso creo que hay mucho por crecer todavía”, apreció. De regreso a la parte logística, la profesional matiza que, si existe un solo error en un documento o una firma, puede perderse el “cut-off” del buque.
Circunstancia que se traduce en un retraso de una semana o más. Sumado a esto, existe “congestión en muchos puertos, transbordos que no se cumplen y controles aduaneros que suman más días al lead time”. Todo ese proceso, asegura, “requiere una coordinación muy fina entre todas las partes involucradas”. Es el caso de proveedores, forwarders, despachantes, transporte local, aduana.
Lo que ocurre silenciosamente en Argentina tiene influencia sobre la matriz energética. Una logística rigurosa, precisa y cargada de matices. Algo imposible para otros países y sobrepasado en otros. Mientras esto sucede, Argentina también apuesta a lo mismo que las mayores potencias del mundo.
