En estas fechas, se siente la tensión energética en Argentina producto del verano. Con el arribo de las primeras olas de calor, las temperaturas extremas empiezan a abordar cada rincón del país. Hay días sofocantes y frustrantes que afectan a la rutina de los ciudadanos/as e incrementan la necesidad de desenvolverse en ambientes frescos. Cuando el termómetro sube hacia números impensados, también aumenta la presión de las redes eléctricas. Todos quieren energía eléctrica al mismo tiempo para cubrir la misma necesidad. Y eso tiene un costo energético y económico.
Apagones, el problema de Argentina cuando llega el verano
El gobierno ya ha propuesto algunas medidas para tratar esta problemática. No obstante, el panorama de todos los años podría volver a repetirse debido a las elevadas temperaturas que se imponen. En muchas ocasiones, el uso exacerbado y continuado de máquinas eléctricas que mantienen la temperatura (como ventiladores o aires acondicionados) tiene como resultado un esquema de sobrecargas y eventuales interrupciones del servicio.
Los picos de demanda comprometen la capacidad del sistema, dando lugar a apagones. Por este motivo, resulta crucial minimizar los riesgos y colaborar conjuntamente para mantener la estabilidad del suministro. Existen algunas prácticas sencillas que pueden implementarse en el día a día para mantenerse fresco sin exceder el uso eléctrico.
Aunque los apagones no dependen del comportamiento de un único hogar, sino la suma de muchos, cada usuario puede poner su «grano de arena». Hábitos simples que pueden tomarse desde hoy son utilizar el aire acondicionado en 26ºC como máximo, ventilar el hogar por la mañana y por la noche para aprovechar los momentos de mejor temperatura natural, aprovechar el uso de cortinas y persianas (que aíslan el calor), evitar la apertura constante de heladeras y desconectar electrodomésticos cuando no se utilizan.
El aumento de tarifas en Argentina sacude el verano
Con el verano haciéndose presente en sus primeros días, la preocupación por el ahorro energético va en aumento, especialmente por el aumento de las tarifas de la luz. La Secretaría de Energía ya ha anticipado una demanda mayor para este verano 2026, alcanzando picos de hasta 30 700 megawatts. En este contexto, se está llevando a cabo una reforma en el mercado eléctrico.
Razón por la que ya se han oficializado los cambios en la segmentación de tarifas para 2026. Los acuerdos contractuales alcanzados con el mercado mayorista incidirán de forma directa sobre las facturas domiciliarias. Asimismo, el Gobierno nacional también tiene en agenda el avance de la reestructuración del sistema de subsidios a partir del 1 de enero del próximo año.
Debido a la nueva secuencia propuesta, una parte de los usuarios que hoy recibe subsidios dejará de hacerlo. Aunque la hoja de ruta oficialista es otorgar una bonificación especial del 25% sobre los precios de la luz y el gas, el descuento se irá reduciendo de forma progresiva hasta su supresión total en diciembre de 2026.
Qué pasará con los subsidios de la luz en Argentina
Desde el mes de enero de 2026, comenzará a regir un nuevo sistema de subsidios energéticos que marcará un antes y un después en la asignación estatal en las tarifas de luz, gas natural, garrafas (GLP) y gas propano por redes. Esta reforma suprime la segmentación previa y los planes sociales separados (Programa Hogar y Tarifa Social de Gas).
En su lugar, operará una sola metodología que divide a los ciudadanos en dos grupos: los que reciben el subsidio y los que no. El acceso se tornará más restrictivo, con criterios de ingresos y patrimonio más exigentes. Hay tensión en Argentina por la llegada del verano, que podría traer consigo alta demanda, aumentos y apagones. Mientras Argentina está expuesta a los apagones de verano, este país vive un sueño hecho realidad.