Amnistía Internacional publicó este martes una denuncia contra Israel, acusándolo de cometer “genocidio en directo” en la Franja de Gaza. De acuerdo a la organización global, las operaciones militares de la Fuerza de Defensa Israelí (FDI) en el enclave palestino, sumado al bloque de ayuda humanitaria, genera una crisis sin precedentes que atentan directamente sobre la vida de los gazatíes.
Un escenario lamentable
Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, escribió el prólogo del informe anula de la ONG sobre derechos humanos, en donde asegura que los países están viendo en sus pantallas “un genocidio en directo”. Resaltó que los Estados son meros espectadores, como si fueran impotentes, de cómo el Ejército israelí masacra a miles de palestinos en la Franja de Gaza.
En esa línea, sostuvo que la destrucción de viviendas, de medios de vida, instituciones educativas e incluso hospitales, dejan entrever la gravedad de la situación. Es por eso que la organización global denunció esto como un “genocidio”, algo que el Estado Judío rechazó de manera categórica. Según las autoridades israelíes, esta denuncia proviene de una institución radical antiisraelí.
El informe de la ONG menciona un escenario lamentable, con “homicidios”, atentados contra la integridad mental y física de civiles, hasta desplazamientos y desapariciones forzadas. Así también denuncian que existe una imposición deliberada de condiciones de vida que tienen como único objetivo provocar la destrucción física de los gazatíes que residen en la región.
Bloqueo de ayuda humanitaria, una masacre en silencio
Uno de los principales factores que atentan contra la vida de los gazatíes en medio de este conflicto es el bloqueo de ayuda humanitaria, que el Ejército israelí aplica en la región desde el 2 de marzo. De esta forma, interrumpió el acceso de medicamentos, alimentos, combustible y otros productos necesarios para tener una condición de vida digna. Esto llevó a que más de 2,4 millones de personas enfrenten una crisis sin precedentes.
Juliette Touma, portavoz de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), calificó al bloqueo como una “masacre en silencio”. Según explicó, los niños de Gaza se acuestan con hambre, los heridos y enfermos no pueden recibir sus medicamentos, ni atención médica por la crisis sanitaria. Además, miles de familias luchan por sobrevivir, lo que convirtió al enclave en una “tierra de desesperanza”.
La representante de esta organización resalta que el Estado Judío utiliza el hambre y la desesperación en la Franja de Gaza como un arma de guerra. Esto es algo que atenta directamente contra la vida de las personas, quienes viven en una situación extrema, sumado a que muchos deben abandonar lo poco que tienen para escapar de los constantes bombardeos lanzados por el Ejército israelí.
Nuevos informes del Ministerio de Salud gazatí
Los ataques que Israel desplegó sobre Gaza, tras la ofensiva del movimiento terrorista palestino el pasado 7 de octubre, dejaron un saldo de 52 365 víctimas fatales hasta el momento. La mayoría de las personas que perdieron la vida en medio de los bombardeos y las incursiones terrestres son civiles, según indica el Ministerio de Salud gazatí en un reciente informe, corroborado por la Organización de las Naciones Unidas.
Este martes, Defensa Civil palestina emitió un nuevo comunicado en el que denunció nuevos ataques contra tiendas de desplazados en Khan Yunis, ciudad ubicada en el sur del enclave. Dicha ofensiva ocasionó cuatro nuevas muertes, las cuales se suman a la lista roja de Gaza. Cabe resaltar que el listado de decesos aumentan día a día, a medida que las autoridades palestinas confirman nuevos ataques a lo largo de toda la región. Para Amnistía, esto es una clara prueba del “genocidio” perpetrado por Israel, algo que considera que debe ser juzgado ante el mundo.