Después de la votación vespertina, los cardenales electores ya habían alcanzado un consenso y por la chimenea de la Capilla Sixtina salió fumata blanca. La comunidad católica ya cuenta con un nuevo papa: Robert Prevost, León XIV, es el nuevo Sumo Pontífice.
Cómo fue el proceso de votación
En la primera votación del 7 de mayo no hubo consenso, en la matutina del 8 de mayo tampoco hubo consenso, pero la votación vespertina del 8 de mayo provocó la alegría en la Plaza de San Pedro: fumata blanca, lo que indicó ¡Habemus Papam!
La fumata blanca es señal de que los 133 cardenales encerrados en la Capilla Sixtina lograron elegir al sucesor del papa Francisco: Papa León XIV, Robert Prevost, es el nuevo Sumo Pontífice.
El cónclave comenzó ayer 7 de mayo con 133 cardenales electores menores de 80 años que salieron en procesión desde la Capilla Paulina hasta la Capilla Sixtina, donde se celebraron las votaciones bajo un riguroso protocolo de silencio y aislamiento del mundo exterior.
Desde el inicio del cónclave los cardenales no se comunicaron con el exterior ni utilizaron algún medio de comunicación. De hecho la Capilla Sixtina tuvo un mega blindaje para asegurar que ninguna información saliera de la Sixtina ni hubiese ninguna intromisión del exterior. El personal auxiliar juró secreto bajo pena de excomunión si llegase a divulgar algún mínimo detalle del cónclave.
El cardenal Dominique Mamberti, de 73 años, pronunció la frase emblemática del Vaticano que anuncia la elección: Annuntio vobis gaudium magnum: Habemus papam! (“Les anuncio con gran alegría: ¡Tenemos papa!”).
Como cardenal protodiácono, Mamberti es el más antiguo de los cardenales y, por tanto, el único autorizado para salir al balcón central de la Basílica de San Pedro y anunciar el nombre del nuevo pontífice y el nombre que este eligió para su pontificado: León XIV.
Los católicos saltan de alegría en la plaza de San Pedro
Los católicos concentrados en la plaza de San Pedro están saltando de alegría gritando “Habemus papam”, desde el balcón de la basílica vaticana de San Pedro, apareció el 267º pontífice de la Iglesia católica: León XIV.
La elección del papa es una tradición que data del siglo XIII, aproximadamente, y que concentra la atención de millones de fieles a nivel global.
Los fieles comenzaron a llegar a la Plaza de San Pedro desde el primer día de votación, retomando la vigilia esta mañana esperando con fe la noticia. Alrededor de 50.000 fieles se acercaron ayer a la plaza de San Pedro, donde mediante pantallas de televisión se transmitió parte del cónclave.
La segunda fumata negra dada esta mañana no evitó que los fieles siguieran llegando y permanecieran esperando este momento. Pudo más el deseo de presenciar el desenlace de la votación puesto que estaban ansiosos por saber quién sería el nuevo líder.
La plaza estuvo repleta con peregrinos, turistas y ciudadanos italianos atentos a las cámaras que estaban apostadas mostrando la alegría de todos por el anuncio del Vaticano y esperando a que se asomara el nuevo líder al balcón central de San Pedro: León XIV.
Los fieles se mantuvieron durante el día tomando café y alzando sus banderas y pancartas, gritando de alegría y grabando con sus celulares cada minuto en la plaza. En el ambiente se respiraba alegría y fiesta por el anuncio, sin perder la calma y manteniendo el orden con una atmósfera festiva, así mantuvieron sus miradas fijas primero en la chimenea de la Capilla Sixtina y luego en el balcón de San Pedro gritando ¡Habemus Papam!