La Fundación humanitaria para Gaza (GHF) continúa con la suspensión en la entrega de los alimentos. Se trata de una situación que agrava la crisis en el enclave palestina, donde miles de familias vuelven a tener el plato vacío tras la breve apertura del bloqueo ejercido por Israel durante los últimos meses. Según explicaron las autoridades de la GFH, los problemas en la distribución de comida se debe a las reiteradas amenazas del grupo Hamas.
Las declaraciones de la Fundación Humanitaria para Gaza
Hubo mucha controversia en el ámbito internacional por la suspensión de la entrega de la ayuda humanitaria en Gaza. Es por eso que los representantes de la fundación respaldada por Israel y Estados Unidos decidieron explicar los problemas que llevaron a tomar esta drástica decisión. “Hamas es la razón por la que cientos de miles de gazatíes hambrientos no fueron alimentados hoy”, destacaron.
En ese sentido, resaltaron que el grupo terrorista envió múltiples amenazas contra sus centros operativos, por lo que no pudieron abrir sus puertas para hacer entrega de la ayuda correspondiente para el día de hoy. “El grupo lanzó amenazas directas contra las operaciones de la GHF. Estas amenazas hicieron imposible proceder hoy sin poner en peligro vidas inocentes”, reza el comunicado publicado.
La Fundación Humanitaria para Gaza resalta que el grupo islamista tiene el objetivo de obstaculizar la entrega de alimentos para controlar el flujo de ayuda en el enclave palestino. En este marco, el grupo destacó que no se dejará intimidar por el movimiento armado palestino y mantendrán su compromiso para asegurar la entrega segura e independiente de los alimentos para los más necesitados.
Polémicas en la distribución de alimentos
Los representantes de esta fundación especificaron que tienen planeado reanudar pronto la entrega de alimentos. No obstante, hay muchas polémicas alrededor de los procedimientos utilizados por esta entidad durante el reparto de comida. Una de ellas tiene que ver con el hecho de haber habilitado tan solo tres puntos operativos, lo que lleva a miles de familias gazatíes a trasladarse miles de kilómetros para recibir un poco de ayuda.
De acuerdo a la FHG, este sistema de distribución es el único medio para impedir que el grupo terrorista obtenga beneficios del reparto. Es por eso que también decidieron limitar el horario de atención en estos lugares, por lo que la gente solo podrá acudir entre las 06:00 y las 18:00 horas, ya que consideran que trasladarse fuera de esos horarios representa un gran peligro para los palestinos.
Otro punto muy cuestionado es el operativo de seguridad que hay alrededor de todo este sistema, el cual está a cargo del Ejército israelí. Esto deja totalmente expuestos a los gazatíes, cuyas vidas dependen del accionar de su enemigo, dejando abierta la posibilidad de que suceda lo mismo que en el barrio Tel al Sultan, en Rafah, donde los militares abrieron fuego contra algunos gazatíes que se trasladaban a estos puntos de entrega, por fuera de las rutas establecidas.
Gaza vive una situación extrema
El bloqueo de ayuda humanitaria que Israel mantuvo en Gaza durante más de dos meses causó una grave crisis en la región. Miles de familias sufren por el hambre, mientras son obligados a desplazarse con bombardeos y ocupación militar israelí. En este marco, la reanudación de la entrega de alimentos representaba un halo de esperanza para los palestinos, quienes se enfrentan a una hambruna sin precedentes, sin embargo, no todo salió bien.
Hubo muchos contratiempos en la entrega de la ayuda, como demoras y saqueos. A esto se le sumó los disparos que el Ejército israelí realizó cerca de los centros operativos de la FHG y ahora, la suspensión de la distribución. Además, la fundación nunca llegó a abrir los puntos en el norte de la Franja de Gaza, donde se estima que viven más de un millón de personas que todavía no pueden acceder a una ración de comida.