La intensidad de los ataques por vía aérea habían disminuido a partir del efecto que dejó el bombardeo coordinado por Estados Unidos a las grandes centrales nucleares de Irán. Pero, aunque los misiles continuaron siendo lanzados desde Irán a Israel, y viceversa, durante el pasado domingo 22 de junio, la magnitud de la contraofensiva registrada en las primeras horas del lunes llaman la atención a los expertos y sigue preocupando por la escalada.
Más ataques cruzados
Definitivamente, lo sucedido el último domingo era la calma que antecedía a la tormenta. Este lunes, con reportes a primeras horas de la mañana, registraron un gran ataque en el norte de Teherán. Las explosiones se produjeron en zonas urbanas de la capital iraní, y fueron dirigidas hacia universidades nucleares que están en los principales edificios de la zona. El objetivo, según informan desde Israel y la FDI, sigue siendo desbaratar la fuerza nuclear del régimen iraní.
Mientras tanto, en el norte de Israel, después de múltiples alarmas que dirigieron a los residentes a sus búnkeres, se desestimó el alerta y se confirmó que los ataques fueron debilitados por las protecciones antiaéreas. Según informan las Fuerzas de Defensa de Israel, los misiles lanzados por Irán quedaron debilitados, pero algunos impactaron en el suelo sin la carga explosiva activa. En paralelo, los mandatarios y diplomáticos siguen con conversaciones en rumbo.
Nuevos bombardeos
Después del ataque ejecutado por Estados Unidos y su carga explosiva de al menos 13 toneladas contra las instalaciones nucleares de Fordow, Natanz e Isfahán, Israel comunicó haber lanzado una ofensiva hacia las rutas que conectan a las ciudades cercanas con los centros de investigación y desarrollo. De este modo, quieren inmovilizar a las autoridades del régimen, obstruyendo el acceso. Por el momento, solo fotografías satelitales muestran el daño superficial de los centros.
Otro ataque fuerte registrado en la capitán de Irán, Teherán, quedó confirmado por el propio ejército de Israel y fue dirigido a una prisión popular en la región, la de Evin. Israel Katz afirmó que el objetivo era este, ya que se encuentra cerca de un edificio de la Guardia Revolucionaria de Irán, junto al edificio de otros grupos militares del estilo. Con esto, los golpes en Teherán pueden verse desde distintos puntos gracias a la humareda. No se reportó oficialmente el número de víctimas.
En materia de diplomacia, Irán comenzó a moverse como no lo estaba haciendo previo al ataque de EE. UU. Ahora decidió reunirse con Vladímir Putin, y fue el ministro de Asuntos Exteriores, Abbas Araghchi, el encargado de hacerlo. El Kremlin confirmó el encuentro y el propio líder de Rusia declaró que el ataque, para él, carece de argumentos válidos. En referencia al accionar de Estados Unidos por supuestas amenazas nucleares.
Lo referido a la carga de uranio que se encontraba alojada en las instalaciones bombardeadas es todavía un misterio, ya que se desconoce de su paradero. En total, según estiman desde las entidades competentes que analizaron el lugar, como la OIEA y su representante argentino al mando, Rafael Grossi, se tratan de unos 400 kilogramos de uranio que está desaparecido en estos momentos. Esto, según las cifras estimadas, sería un número muy cercano al necesario para crear un arma nuclear, informó la CNN.
Advertencia iraní
La ofensiva israelí de este lunes en las primeras horas del día provocaron que el ministro de Defensa, Amir Hatami, se dirija contra Estados Unidos y advirtió con una respuesta contundente. “Esta vez no será diferente”, declaró el mandatario después de una reunión entre varios cabecillas del ejército de Irán, haciendo referencia a que, en anteriores ocasiones, respondieron contra los ataques de los norteamericanos.