El cese a la actividad bélica conseguida por conversaciones entre Israel y Siria, con un temporal fin a los enfrentamientos militares, trajo un poco de paz a Damasco, capital el país sirio. Sin embargo, a pesar del alto el fuego, el gobierno de Siria decidió desplegar más fuerzas de seguridad a Sweida, la conflictiva provincia del sur que dejó más de 300 muertos por enfrentamientos entre tribus de beduinos y los drusos, a quienes el ejército de Israel busca proteger. Las autoridades de facto de Siria hablaron con claridad sobre la medida y piden un fin de la violencia.
Israel y su presencia en Siria
Durante días de bombardeos que alcanzaron algunas entidades gubernamentales en Siria, tanto en Sweida como en Damasco, Israel puso fin a la advertencia bélica en el conflicto que, según el presidente de facto sirio, Ahmad al-Sharaa, todo estuvo cerca de salirse de control. Culpabilizando a los drusos, tachándolos como “grupos armados” que viven en Sweida, el gobierno local intentó disminuir el daño material y humano con el envío de más fuerzas militares.
Si bien la paz está instaurada, se trata de una temporal y, desde el Ministerio de Defensa y el Ministerio del Interior, informaron que intentarán mantener el orden con esta medida. Israel, en represalia contra el accionar de Siria contra el pueblo druso, instalado hace varias décadas en el sur de aquel país, decidió ir directo contra Sweida y Damasco con ataques aéreos que recorrieron el mundo por las impactantes imágenes que dejaron. El cese al fuego, después de esto, se cumplió.
Medidas a futuro
El gobierno sirio decidió enviar más tropas a la zona del conflicto, al sur del país: Sweida. Previniendo ante posibles nuevas escaladas del conflicto que involucró a los drusos y a los pueblos beduinos, argumentaron que esta medida es tomada para recuperar la estabilidad regional. Además, entre otras tantas acusaciones lanzadas por el presidente interino o de facto sirio, se destaca la denuncia a los países de la región involucrados.
Ahmed al-Sharaa anunció el alto el fuego, pero también criticó el accionar de “países extranjeros que apoyaron grupos armados”, refiriéndose a Israel y la influencia en el pueblo druso. Hablándole a los sirios que lo apoyan, pidió que el país se mantenga unido y tratando de evitar más conflictos que puedan costar vidas, como ya sucedió en la última semana.
Además, varios mandatarios estadounidenses hablaron tras confirmar el diálogo que mediaron entre Israel y Siria, que encendió alarmas después de los bombardeos a Sweida, las treguas de los pueblos del sur y el ataque israelí y sus fuerzas, las FDI, contra el cuartel pegado al Palacio Presidencial. Entre sus declaraciones, se destaca que el terreno todavía es inestable y, con facilidad, se puede encender otra llama de conflicto.
De este modo, muchos ven lógico el envío de tropas a la zona de la actual tregua en Sweida. Thomas Barrack, el encargado estadounidense de las conversaciones y que también es el embajador de EE. UU. en Turquía, anunció que todavía hay varios puntos de violencia en la ciudad, más en zonas rurales que en las zonas urbanas más pobladas.
Detalles de los ataques
Según informan varios grupos de Derechos Humanos, encargados de enviar asistencia médica y humanitaria a zonas en conflicto, el ataque entre sirios y drusos dejó un total de 320 muertos, pero con niveles de violencia incontrolables. Mientras tanto, esperan que la presión internacional, como está sucediendo, ponga fin definitivo a todo. Del mismo modo, los grupos beduinos aceptaron con diálogo el alto el fuego, lo que marca un punto de partida.
La decisión de coordinar el envío de fuerzas de seguridad sirias a Sweida también es uno de los pedidos principales de los referentes drusos, quienes buscan apoyo interno, además de las fuerzas israelíes que actuaron en los últimos días.