Ucrania enfrenta su mayor desafío desde el inicio de la guerra tras la intensificación de los ataques rusos. En estas últimas semanas, Rusia apretó el acelerador y coordinó ofensivas mucho más letales en distintas regiones del territorio enemigo. Un reciente informe oficial del Gobierno de Volodímir Zelenski revela crudas consecuencias por los ataques masivos con drones y por las invasiones tácticas perpetradas por el Kremlin.
Drones Shahed, los protagonistas de la guerra
Los ataques coordinados con drones Shahed tomaron gran protagonismo en estos últimos meses. Su creciente participación en la guerra se debe a la fabricación local de los vehículos no tripulados. Antes, Rusia tenía que comprarlos directamente a Irán y esperar su desembarco, pero ahora, comenzaron a fabricarse en el país. Esto le otorga mayores comodidades a la hora de planificar estrategias aéreas.
Ante este nuevo escenario, los sistemas de defensas de Kiev sufrieron grandes saturaciones. Las tácticas de “enjambre” por parte del ejército ruso han triplicado la tasa de operativos exitosos en las últimas semanas. Asimismo, generaron graves daños a infraestructura civil, militar y energética en Ucrania. Además, hubo importantes bajas civiles y de soldados a causa de estas ofensivas.
En el informe de la fuerza aérea de Kiev, citado por el Financial Times, confirman que el 15% de los aparatos aéreos lograron penetrar las defensas entre abril y junio. Esto representa un aumento significativo respecto al trimestre anterior. En ese lapso de tiempo, tan solo un 5% de los vehículos no tripulados lograron ingresar al país europeo con éxito. Hablamos de un incremento alarmante que preocupa a las autoridades locales.
Un llamado de atención a las defensas de Volodímir Zelenski
La intensificación en el volumen de ataques representa la principal amenaza para Kiev. Como consecuencia del incremento de artefactos aéreos utilizados en las ofensivas rusas, la defensa aérea de Ucrania queda muy debilitada. “El problema no es que las defensas estén empeorando. Lo que vemos es que las nuevas tácticas de enjambre y los Shahed ahora vuelan a mayor altitud. Esto los hace más efectivos”, explicó un experto.
Por ejemplo, el Kremlin lanzó durante el fin de semana un ataque con 426 drones en una sola operación nocturna. Muchos de ellos penetraron las defensas y atacaron distintas regiones del país europeo. Poco pudo hacer la defensa aérea en este caso. Asimismo, la inmensa cantidad de vehículos utilizados para esta ofensiva mostró las crecientes vulnerabilidades de su capacidad militar.
Cabe resaltar que las defensas actuales de Kiev contra los drones rusos cuentan con múltiples elementos de tecnología avanzada. Entre los sistemas utilizados podemos nombrar un sistema de guía de GPS, ametralladoras y cañones antiaéreos, incluyendo el cañón alemán Oerlikon Skynez. No obstante, no cuentan con la capacidad suficiente para enfrentarse a los vehículos no tripulados mejorados del Kremlin.
En este último tiempo, Rusia mostró una gran capacidad de adaptación a la guerra. El área tecnológica de su ejército identificó las vulnerabilidades de Kiev e implementó modificaciones muy efectivas en los drones Shahed. Ahora, estos vehículos mejoraron su velocidad y pueden volar a mayor altura. Esto les permite mantenerse fuera del alcance de las ametralladoras enemigas. Además, hubo un aumento significativo en la producción de los mismos.
La presión de Ucrania
La mejora en las capacidades tecnológicas de estos aparatos, sumado al aumento de su producción, enciende las luces de alerta entre las autoridades de Kiev. Ante este panorama desalentador, el presidente Volodímir Zelenski anunció un acuerdo con Eric Schmidt, director ejecutivo de Swift Beat. Esta alianza les permitirá coproducir cientos de miles de drones con mejor tecnología para Ucrania.
Dicho acuerdo llega en un momento de plena urgencia para el ejército de Kiev. La mayor eficacia en los ataques y la mejora de su tecnología, deja en claro que la innovación constante se convirtió en un factor primordial para mantenerse en pie en esta guerra. Mientras tanto, el Kremlin continúa con sus incursiones estratégicas en territorio ucraniano y mantiene la presión con bombardeos constantes en distintas regiones.