Las nuevas rondas de negociaciones no llegaron a buen puerto y la tensión crece en la región. En este marco, Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, sostiene que Rusia mantiene una postura negativa, la cual impide avanzar en el acuerdo de paz. Tras las complicadas conversaciones en Berlín, Kiev anunció nuevas sanciones contra el Kremlin, que incluso alcanzarían a varios de sus aliados en esta guerra, como es el caso de China.
Sin avances claros
En estas últimas semanas, el equipo diplomático de Ucrania, acompañado de Volodímir Zelenski, llevó adelante una extensa gira por Europa para dialogar con sus aliados sobre el acuerdo de paz. Fueron conversaciones claves para el armado del nuevo documento que presentaría ante la parte estadounidense, el cual sería remitido también a Moscú. Desde Kiev había grandes expectativas respecto al trabajo realizado, por lo que esperaban buenas noticias.
Además, los recientes diálogos con Estados Unidos habían sido fructíferos y constructivos, lo que pintaba un horizonte prometedor para Kiev y sus anhelos de paz. No obstante, al momento de las negociaciones en Berlín, las cosas comenzaron a complicarse, e incluso hubo pedidos que no cayeron muy bien entre la comitiva ucraniana, como la entrega de Donetsk. Frente a ello, Zelenski exigió que los pedidos de su país sean escuchados.
Y si bien el mandatario reconoció que hubo avances en algunas cuestiones, hay otras que todavía están lejos de resolverse, como el tema de las concesiones territoriales. Pese a ello, elogió el trabajo de la parte estadounidense, que muestra disposición para intentar mediar el conflicto. En cambio, criticó la postura negativa del Kremlin, a la que considera como la principal traba para llegar a un acuerdo.
Sanciones para Moscú
En el marco de las negociaciones con EE.UU., Kiev planteó la necesidad de trabajar en un nuevo paquete de sanciones para Moscú, con el objetivo de castigar su brutalidad y cortar el financiamiento de la guerra. El pedido de Ucrania contempla restricciones comerciales y económicas, presión diplomática y penalizaciones para los aliados del Kremlin en esta guerra, que ha hecho tanto daño en territorio ucraniano desde el 2022.
Luego de días de extensas conversaciones, Zelenski anunció un nuevo paquete de sanciones contra entidades rusas y aquellos que apoyan la invasión, el cual entraría en vigor antes de fin de año. «Habrá al menos un paquete de sanciones dirigido a aquellos que trabajan con el complejo militar-industrial ruso, que incluye no solo a individuos de Rusia, sino también, en particular, de China», adelantó el mandatario en su cuenta de X.
Por otro lado, destacó que dichas sanciones también alcanzarán «a todos aquellos que justifican la agresión rusa y promueven su influencia a través de la cultura de masas, así como los atletas que utilizan la atención pública al deporte para glorificar esa agresión». Mediante estas infracciones, Kiev pretende aumentar la presión contra el Kremlin, en busca de modificar su postura diplomática en un marco de negociaciones.
Según explicó el presidente ucraniano, instituciones de la Unión Europea colaboran en el armado de este nuevo paquete de medidas, especialmente en lo que respecta a las sanciones sobre los activos energéticos del Kremlin y a los oligarcas conectados a él. A esto se le suma el trabajo de Canadá, quien también prometió implementar penalizaciones contra la parte rusa.
Señales negativas
Mientras Kiev y sus aliados trabajan en las medidas punitivas, el Kremlin no disminuye su presión en el frente de batalla. Esto es algo que el mismo Zelenski denunció este domingo, luego de una conversación con el primer ministro noruego, Jonas Gahr Store. «Las señales procedentes de Rusia siguen siendo negativas: ataques en los frentes, crímenes de guerra en las zonas fronterizas y ataques continuos contra infraestructura energética», reclamó.