29/06/2021

Sucesos

CASO

Ofrecen un millón de pesos para encontrar a un prófugo que abusó de una nena de 12 años

El Ministerio de Seguridad recompensará con dinero a quien le brinde datos sobre el paradero del prófugo Leandro Sebastián Martínez.

El Ministerio de Seguridad informó que pagará un millón de pesos de recompensa “a aquellas personas que brinden datos útiles que permitan lograr la aprehensión de Leandro Sebastián Martínez”, prófugo e imputado por haber abusado de una niña de su familia, que tenía 12 años en el momento de la denuncia. La medida se publicó en el Boletín Oficial a través de la Resolución 310/2021.
La orden de captura nacional se emitió el día 24 de enero de 2020, e internacional desde el día 25 de febrero de 2020. Está imputado por “abuso sexual agravado, que por las circunstancias de su realización y su duración en el tiempo configuraron un sometimiento gravemente ultrajante”, según informó TN.
El pedido había sido hecho por el doctor Leandro Nicolás Ventricelli, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº1 del Departamento Judicial de Moreno, General Rodríguez, Provincia de Buenos Aires.
Aquellas personas que tengan datos deberán comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de personas ordenada por la Justicia, al número telefónico de acceso rápido 134.
En febrero de 2020, la nena le insistió a Martínez que quería mostrarle una pared pintada que ella compartía con su hermanito. Su intento por acercarse a la nena y manosearla quedó grabado en las cámaras de seguridad de la casa. Desde ese día, el hombre está prófugo, pero antes hubo una larga historia de abusos.
La primera vez ocurrió en la casa de él. Ella y su tío tenían una relación estrecha y de confianza, pero una noche la menor mandó audios a una amiga contándole que su tío le tocó la cola y la “chucha”. “Estábamos los cuatro en la cama y me desperté con él tocándome”, dijo. La amiga se los reenvió a los padres de V.
Enseguida fueron a buscar a la nena en el country donde vivía el imputado. Cuando hablaron con V. contó lo sucedido, dio más detalles y sus padres resolvieron alejarse de ese lado de la familia. Los encuentros se espaciaron hasta que la nena pidió permiso para ir a un pelotero con Martínez, sus padres aprobaron el paseo pero la nena no pasaría la noche en casa de sus tíos.
Luego, contó que su tío le había vuelto a tocar la pierna con lascivia mientras estaban en el lugar y dijo: “No quiero ir nunca más a lo de Leandro y la tía”.
En una clase de ESI (Educación Sexual Integral) V. reconoció esas acciones a las que había sido sometida y dijo a sus 35 compañeros: “A mí me pasa, mi tío abusó de mí”.
En una fiesta familiar, la nena le pidió al tío que la acompañe a ver todas las mejoras de la casa. En cada una de las habitaciones a las que entraba, el hombre la manoseaba. En un momento, Leandro se da cuenta del monitos y la nena comentó: “¿Viste que mis papás pusieron cámaras de seguridad?”. El hombre miró la cámara y al salir, presionó el cuello de la nena, como advertencia. Luego, el padre dijo que los videos coincidían con todo lo que la hija les había comentado.

El Ministerio de Seguridad informó que pagará un millón de pesos de recompensa “a aquellas personas que brinden datos útiles que permitan lograr la aprehensión de Leandro Sebastián Martínez”, prófugo e imputado por haber abusado de una niña de su familia, que tenía 12 años en el momento de la denuncia. La medida se publicó en el Boletín Oficial a través de la Resolución 310/2021.

La orden de captura nacional se emitió el día 24 de enero de 2020, e internacional desde el día 25 de febrero de 2020. Está imputado por “abuso sexual agravado, que por las circunstancias de su realización y su duración en el tiempo configuraron un sometimiento gravemente ultrajante”, según informó TN.

El pedido había sido hecho por el doctor Leandro Nicolás Ventricelli, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº1 del Departamento Judicial de Moreno, General Rodríguez, Provincia de Buenos Aires.

Aquellas personas que tengan datos deberán comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de personas ordenada por la Justicia, al número telefónico de acceso rápido 134.

En febrero de 2020, la nena le insistió a Martínez que quería mostrarle una pared pintada que ella compartía con su hermanito. Su intento por acercarse a la nena y manosearla quedó grabado en las cámaras de seguridad de la casa. Desde ese día, el hombre está prófugo, pero antes hubo una larga historia de abusos.
La primera vez ocurrió en la casa de él. Ella y su tío tenían una relación estrecha y de confianza, pero una noche la menor mandó audios a una amiga contándole que su tío le tocó la cola y la “chucha”. “Estábamos los cuatro en la cama y me desperté con él tocándome”, dijo. La amiga se los reenvió a los padres de V.

Enseguida fueron a buscar a la nena en el country donde vivía el imputado. Cuando hablaron con V. contó lo sucedido, dio más detalles y sus padres resolvieron alejarse de ese lado de la familia. Los encuentros se espaciaron hasta que la nena pidió permiso para ir a un pelotero con Martínez, sus padres aprobaron el paseo pero la nena no pasaría la noche en casa de sus tíos.

Luego, contó que su tío le había vuelto a tocar la pierna con lascivia mientras estaban en el lugar y dijo: “No quiero ir nunca más a lo de Leandro y la tía”.

En una clase de ESI (Educación Sexual Integral) V. reconoció esas acciones a las que había sido sometida y dijo a sus 35 compañeros: “A mí me pasa, mi tío abusó de mí”.

En una fiesta familiar, la nena le pidió al tío que la acompañe a ver todas las mejoras de la casa. En cada una de las habitaciones a las que entraba, el hombre la manoseaba. En un momento, Leandro se da cuenta del monitos y la nena comentó: “¿Viste que mis papás pusieron cámaras de seguridad?”. El hombre miró la cámara y al salir, presionó el cuello de la nena, como advertencia. Luego, el padre dijo que los videos coincidían con todo lo que la hija les había comentado.




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