01/01/2018

El mundo

Neozelandeses celebraron en una isla en aguas internacionales para evitar la "ley seca" de fin de Año

Bajo la amenaza de una costosa multa o incluso un arresto, un grupo intentó crear una jurisdicción fuera de esa "molesta" ley para poder ver los fuegos artificiales con una bebida en mano.

Las autoridades de Nueva Zelanda mantuvieron la prohibición de beber alcohol en lugares públicos, durante las fiestas de fin de año. Muchos ciudadanos vieron sus planes frustrados. Sin embargo, un grupo no se quedó de brazos cruzados y montó una insólita obra para cumplir sus objetivos.

Los neozelandeses que estaban determinados a beber alcohol en Coromandel sin arriesgarse a pagar la multa de USD 180, y un posible arresto, "construyeron" un islote, asegurando estar a salvo de la ley seca en "aguas internacionales", pese a estar a solo algunos metros de la orilla.

Luego de montar la isla, colocaron una mesa de picnic sobre ella y pudieron disfrutar con cierta comodidad de lo que deseaban: una cerveza y fuegos artificiales.

Aunque las autoridades de la península notaron el plan, decidieron tomar la situación con humor. "Eso es pensamiento creativo. Si me hubiese enterado antes, me hubiera unido", bromeó el inspector John Kelly, comandante de la policía local.

La idea también fue elogiada por la alcaldesa local, Sandra Goudie. "Eso es algo que amo de Coromandel, la naturaleza inventiva de la gente. Se trata de la creatividad, aunque la realidad legal sea un poco diferente", indicó, en declaraciones al portal Stuff.

Las imágenes fueron compartidas en Facebook por David Saunders, quien comentó a la BBC: "Fue grandioso ver a algunos kiwis teniendo un poco de diversión". Además, criticó que la policía se dedique a detener y multar a adolescentes con alcohol, ya que consideró que esa es tarea de los padres.

Ya en la mañana del 1 de enero, el islote se había vuelto visible y podía verse a sus "habitantes" disfrutando de las primeras horas del 2018.





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