Se resiente la oferta de lácteos y aumentan los precios

La crisis productiva que ahoga al sector lácteo empujó hacia arriba los precios de venta de estos artículos esenciales, en todos los canales de comercialización.Las dificultades se deben, principalmente, a la caída de las exportaciones y al retroceso de los precios que la industria paga a los productores, como consecuencia de la sobreoferta del mercado local.

Por este contexto adverso, la producción láctea se contrajo en los últimos meses, debido a la pérdida de rentabilidad, lo cual contribuyó a que disminuyera la oferta de productos en el mercado y, en consecuencia, a que se dispararan los precios de venta.

La inflación del primer bimestre del año acumuló un aumento del 3,8%: 1,3% en enero y 2,5% en febrero. Y uno de los factores que influyó en la aceleración de los precios -después de la suba de las tarifas de los servicios públicos- fue, precisamente, el aumento de los alimentos y, en especial, de los lácteos.

Ahora bien, ¿a qué se debe el aumento en los precios de los lácteos? El presidente a la Mesa de Lechería de Tucumán, Domingo Colombres, explicó que la Argentina producía, hasta hace casi dos años, alrededor de 11.000 millones de litros de leche, de los cuales 8.500 millones de litros se destinaban para el consumo interno.

El directivo remarcó que los 2.500 millones de litros de excedente se orientaban a la exportación. “El problema es que la Argentina comenzó a perder mercados externos y las ventas al exterior retrocedieron. Entonces, al caer las exportaciones, el mercado local se sobreofertó y esto deprimió el precio interno de la leche. Por lo cual, ante la pérdida de rentabilidad, y ante los daños provocados por las inundaciones del año pasado en la zona central del país, la producción de leche, en la actualidad, cayó a 9.700 millones de litros”, señaló Colombres.

Hoy, los productores lecheros de Tucumán reciben, por parte de la industria láctea, alrededor de $ 5,10 más IVA por litro de leche, según detalló Colombres, mientras que en las góndolas de las cadenas de supermercados el sachet de leche entera, por ejemplo, cuesta $ 21 en promedio. “Hubo una cartelización por parte de la industria (es decir, una estrategia conjunta para acordar aumentos de precios), pese a que el valor interno se deprimió. Esto explica porqué los productores cobran menos. Esta situación dejó muy mal parado al sector”, advirtió el Colombres.

“Para que la producción láctea sea sustentable es necesario que el sector gestione las subas y las bajas del precio internacional de los lácteos. Además, es necesario revisar el poder de negociación de los supermercados, que forman los precios. El que paga es eslabón más débil, o sea el productor”, concluyó Colombres.

A la caída de la producción láctea se suma la crisis de la empresa Sancor, uno de los principales actores del mercado argentino. El Gobierno nacional, el sindicato de trabajadores y los directivos de la firma negocian una ayuda financiera de $ 450 millones, a cambio de que la empresa ordene su estructura y suspenda despidos.