La compañía, después de restablecerse el servicio, afirmó que había "localizado el problema" y que pedía "disculpas por las molestias", aunque evitó explicar de qué se trataba la falla detectada.
La caída de más de 120 minutos de la aplicación fue porque los servidores de WhatsApp se estuvieron preparando para probar una actualización de la app.
En un principio, WhatsApp no hizo ningún comentario sobre cuál era el motivo que causó el colapso del servicio de mensajería, pero en un segundo comunicado de la compañía, después de restablecerse el servicio, afirmó que había "localizado el problema" y que pedía "disculpas por las molestias", aunque evitó explicar de qué se trataba la falla detectada.
Dave Anderson, experto en experiencia digital, dijo "WhatsApp envía una nueva versión de la aplicación cada pocos días y es probable que el estar creando código nuevo cada poco tiempo suponga que a veces no esté listo para su lanzamiento", dijo y añadió que "cada desarrollo viene con un riesgo. Sólo se necesita una línea de código errónea y la aplicación puede fallar".
Según apuntaron expertos entrevistados en otros diarios digitales europeos especializados, las actualizaciones serían las siguientes: