28/09/2016

Los ex presidentes de EE.UU. adelantan que no votarán por Trump

Los demócratas están del lado de Hillary y los republicanos ya admitieron que en esta oportunidad no apoyarán a su partido.

Todos tuvieron lo que añoran Hillary Clinton y Donald Trump: conseguir el voto de la gente para sentarse en el sillón del Salón Oval y dirigir desde ahí al país. Y pese a que no todos son del mismo partido, sí están de acuerdo en algo: el republicano no es lo que Estados Unidos necesita.

 

Son cinco los presidentes estadounidenses que están vivos y ninguno de ellos está a favor de Trump. Tres demócratas, Jimmy Carter (1977-1981), Bill Clinton (1993-2001) y Barack Obama (2009-actualidad); y dos republicanos, padre e hijo: George H. W. Bush (1989-1993) y George W. Bush (2001-2009), de acuerdo a una nota publicada por el diario español El Mundo.


Que los demócratas estén a favor de Clinton claro que no sorprende, mucho menos si uno de ellos es su esposo. Carter dijo que pese a que ambos candidatos a la Casa Blanca son "bastante impopulares", no hay dudas "de que uno de los dos candidatos está mejor cualificado que el otro". "Todo el mundo sabe que soy demócrata y votaré demócrata", aseguró Carter.


El apoyo de Bill Clinton a su esposa se vio a lo largo de los últimos meses, en cada acto que habló en su favor, en el extenso discurso que brindó en la convención demócrata, cuando la ex secretaria de Estado fue confirmada como la candidata del partido.


La alianza Obama-Clinton es ya casi histórica. Tras enfrentarse en las primarias de 2008, ambos decidieron hacer las paces y desde entonces se muestran alineados. "Creo que nunca ha habido un hombre o mujer -no yo, no Bill, nadie- más cualificado que Hillary Clinton para ser presidente de los Estados Unidos", aseguró semanas atrás el actual mandatario. "Observé su inteligencia, su juicio y su disciplina. La gente no es consciente de las exigencias de este trabajo. Cualquiera puede soltar un 'tuit'. Cualquiera puede ser crítico. Pero eso no significa que puedas manejar una crisis internacional", advirtió Obama .


La postura que llama la atención es la de la familia Bush. Pese a que en el pasado apoyaron a los candidatos presidenciales John McCain en 2008 y Mitt Romney en 2012, todavía no han dicho que van a votar a Trump. Y falta poco más de un mes para las presidenciales.


George W. Bush criticó en más de una oportunidad al millonario. Es cierto que parte de las criticas tuvieron lugar en medio de la primaria republicana, cuando su hermano Jeb aspiraba a la candidatura. Pero ocurrieron. "La persona más fuerte no suele ser la que grita más en la habitación. Entiendo que los estadounidenses estén enfadados y frustrados. Pero no necesitamos a alguien en el Despacho Oval que refleje e inflame nuestro odio y frustración", dijo en febrero, en Carolina del Sur.


Su padre tampoco está muy contento con el magnate. De acuerdo a Kathleen Hartington Kennedy Townsend, hija del ex senador y ex fiscal general de los EE.UU. Robert Kennedy, George Bush padre le confesó que por esta vez iba a dejar a un lado su partido para apoyar a Clinton.


Jeb Bush también forma parte de la polémica. Ya admitió que no votará por Trump, pero tampoco lo hará por Hillary. (La Nación)