Se tiró de un colectivo porque veía fantasmas y sentía olor a azufre

Un hombre de 35 años que viajaba de Iguazú hacia Buenos Aires rompió una ventanilla y se tiró de un interno de la empresa de colectivos Crucero del Norte porque veía fantasmas y sentía olor a azufre.
Sobre la avenida de tránsito pesado en Eldorado, el pasajero que viajaba en el piso superior comenzó a golpear y rompió una ventana. El chofer detuvo la marcha y el hombre se arrojó desde la altura.
Al caer, empezó a correr gritando que lo perseguían fantasmas y que sentía olor a azufre. Después de unas horas, la Policía lo encontró en un monte a la vera de una avenida a metros de ruta 12. Los uniformados trasladaron al convulsionado pasajero a la comisaría Primera para ser atendido por el médico policial, quien determinó que padece un cuadro depresivo y debe ser medicado.