Malcorra: "Con el Reino Unido no firmamos un acuerdo sino una declaración conjunta"

En la jornada previa a la Asamblea General de las Naciones Unidas, la canciller Susana Malcorra respondió algunas críticas por los términos de lo recientemente acordado entre la administración Mauricio Macri y el gobierno británico.

"Me parece que no se ha leído la declaración en toda su magnitud. No es un acuerdo, es una declaración conjunta firmada con el Vicecanciller Duncan, en el marco del Foro Empresarial, y en paralelo tuvimos una reunión de trabajo bilateral. Allí avanzamos en las cuestiones que ya habían discutido en su momento el ex Primer Ministro Cameron y el Presidente Macri", señaló la canciller durante una entrevista concedida esta tarde a Radio Continental.

En cuanto a la cuestión del reconocimiento de "los soldados enterrados como NN en Malvinas", Malcorra afirmó: "Siempre dijimos que ésta es una composición de aquellos temas positivos, propositivos, en los cuales hay que trabajar: inversiones, temas culturales, investigación, el área de seguridad y también esto involucra la cuestión de Malvinas".

"El aspecto de la Cuestión Malvinas empieza por la referencia a la cuestión de la soberanía, y hace referencia al acuerdo de 1989. Que hayamos logrado, en una Declaración Conjunta, que ambas partes reconozcamos que el tema de la soberanía es parte de nuestra discusión es central, porque, últimamente, en el Comité de Descolonización (de la ONU), la posición ha sido volver a la cuestión del derecho de los habitantes de las Malvinas -o sea, la autodeterminación- y salirse del tema de la soberanía, que es tan fundamental para nosotros", aseveró la canciller.

Malcorra expresó que ha habido una lectura de esta declaración conjunta como si fuera "la firma de un acuerdo entre ambos países que tienen todos los temas resueltos. Algunas serán cuestiones operativas, y otras tendrán que pasar por todos procesos que corresponden, incluyendo el Congreso, para que sean aprobadas".

La declaración conjunta firmada por la Argentina y el Reino Unido cosechó fuertes críticas por dejar de lado la discusión por la soberanía y también porque remueve los obstáculos para que Londres avance en la exploración hidrocarburífera. Los principales cuestionamientos provienen del Frente Para La Victoria y de ex combatientes de la guerra de Malvinas, quienes afirmaron que el gobierno "está incurriendo en el delito de incumplimiento de deberes de funcionario público", al "alejarse del mandato constitucional" de ratificar la soberanía sobre las islas del Atlántico Sur.