20/02/2023

Argentina

Salud

Nueva variante de gripe aviar genera preocupación en la industria avícola de Argentina

La Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas (CAPIA), además de recomendar tranquilidad ante la detección de influenza aviar en el país, ha publicado una serie de recomendaciones para controlar la propagación de la enfermedad.

El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) ha confirmado recientemente nuevos casos de influenza aviar (IA) H5 en aves de traspatio en las provincias de Córdoba y Salta. 

La Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas (CAPIA) ha expresado su preocupación por las posibles consecuencias que podrían derivarse de este brote, pero ha recomendado a los productores y al público en general que mantengan la calma. 

Según el presidente de CAPIA, Javier Prida, "se trata de un caso aislado en ave silvestre y estamos con los sistemas activados para mitigar el traslado al comercio". Prida también ha destacado que CAPIA está trabajando en estrecha colaboración con las autoridades sanitarias y de política agropecuaria para tomar medidas preventivas y de control. 

En cuanto a la respuesta de SENASA, Prida ha declarado que "está actuando muy bien, con protocolos internacionales, profesionalismo y compromiso". 

La industria avícola del país se encuentra comprometida en colaborar con las autoridades para redoblar las medidas de prevención y control en todos los establecimientos productivos.

Recomendaciones de CAPIA

La Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas (CAPIA), además de recomendar tranquilidad ante la detección de influenza aviar en el país, ha publicado una serie de recomendaciones para controlar la propagación de la enfermedad. 


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Según la entidad, el virus de la influenza aviar se elimina a través de las heces y secreciones respiratorias de las aves, y se puede transmitir por contacto directo con las secreciones de aves infectadas o indirectamente a través de agua contaminada. 

Las aves silvestres migratorias son los huéspedes y reservorios naturales del virus y pueden transportar distintas cepas en sus tractos intestinales o respiratorios. Por lo tanto, es esencial limitar la exposición de las aves de corral a las aves silvestres para minimizar el riesgo de introducción de la influenza aviar. 

Los brotes de la enfermedad pueden tener consecuencias económicas graves para la industria avícola, los medios de subsistencia de los productores y el comercio, ya que los productores pueden sufrir un alto nivel de mortalidad en sus bandadas, llegando a un 50%. 

Además, aunque la transmisión de las aves a los seres humanos suele ser esporádica y en un contexto específico, las personas que están en contacto estrecho y repetido con aves infectadas o con entornos muy contaminados deben extremar las medidas de prevención para mitigar el riesgo.




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