17/04/2018

Tucumán

La mamá de Gisell comentó cómo fue vivir en el infierno de las adicciones

El crimen dejó al descubierto el consumo de crack en la provincia. Los testigos se contaron entre los consumidores
La mamá de Gisell comentó cómo fue vivir en el infierno de las adicciones | El Diario 24 Ampliar (1 fotos)

Gisell Barrionuevo Nuñez.

El fiscal Jorge Carrasco escuchó como fueron los últimos años de la vida de Gissell Tatiana Barrionuevo Núñez, de 17 años. El desgarrador relato fue realizado por Norma Beatriz Núñez, la víctima del homicidio. “Mi hija comenzó a desaparecer de casa desde hace unos cinco años, cuando empezó a tener problemas de adicciones”, explicó la mujer con lágrimas en los ojos.

En la Justicia también contó que ella misma era la encargada de realizar las denuncias cada vez que se fugaba del hogar. “Hizo varios tratamientos que luego abandonaba. En la guardia del hospital de Monteros fue desintoxicada varias veces. Conseguí que a través de una orden judicial la internaran en diciembre pasado en el Hospicio del Carmen. Pero se escapó en enero”, comentó.

La mujer dijo que una vez fue amenazada por una joven cuando buscaba a su hija. “Si seguís haciendo denuncias no la verás nunca más viva, fue el mensaje que me dieron. Varias veces le pregunté quiénes eran sus amigos de la droga, pero nunca me decía porque sabía que los denunciaría”, agregó.

Núñez relató además la dolorosa confesión de su hija: “una vez no pudo más y me contó llorando que las tres personas que están acusadas de matarla la vendían por $ 300 a los hombres de la ciudad. Ella siempre se manejaba en la casa de ‘Lulo’ y de ‘Pony’ y le daban para vender y para que ella consuma. Siempre venía con ropa nueva y cuando le consultaba de dónde había sacado el dinero para comprarla, me contestaba que se la habían regalado sus amigas”.

Yo fumo cocaína, que en realidad se llama crash”, aseguró una de las personas que declaró en la causa por el crimen de Gissell Tatiana Barrionuevo Núñez. Ese es el nombre que le impusieron a la misma droga conocida a nivel mundial como crack.

Se trata de una sustancia ilegal creada a partir de la combinación de clorhidrato de cocaína y bicarbonato. Se consume fumándose en pequeños tubos de vidrio y tiene un efecto inmediato, pues empieza a actuar en aproximadamente 10 segundos.Además de estar considerada como la forma de cocaína más adictiva, es la droga que más fácilmente puede provocar adicción psicológica, incluso en aquellas personas que la consuman por primera vez.

Sus efectos iniciales son más rápidos e intensos incluso que otras drogas inyectadas y estos se caracterizan por un breve estado de euforia, placer o aumento de la energía, aunque también estimula el sistema nervioso y circulatorio. Sin embargo, el crack es mucho más dañino que la cocaína y tiene unos graves efectos adversos potencialmente mortales, especialmente cardiovasculares, psicológicos, hepáticos y pulmonares.

La droga comenzó a consumirse en los 80 en los Estados Unidos. Luego se trasladó a Europa, donde Hamburgo, Londres y París reúnen la mayor cantidad de consumidores. En nuestro continente, Brasil, con 370.000 adictos al crack, al igual que en los otros países, causan serios problemas a la salud pública.

Según confiaron las fuentes consultadas, esa droga se la está preparando artesanalmente y no se la comercializa a gran escala. Los consumidores mezclan la “alita de mosca” (así se conoce a la cocaína de mayor pureza que se consigue en la calle a $ 100 el gramo) con bicarbonato y agua. Mediante una fuente de calor evaporan el líquido y quedan formados unos cristales que luego se fuman.

En el expediente por el crimen de la adolescente no sólo hay testigos que aseguraron consumirla, sino que además dieron a entender que uno de los acusados tenía todos los elementos para producirlo en una vivienda donde normalmente se reunían para consumirla.

Uno de los acusados, siempre según la causa que llevó adelante el fiscal Carlos Carrasco, le pidió a un colaborador que limpiara y escondiera todos los elementos que se utilizan para la producción de esa sustancia. Ese trabajo se habría realizado en la vivienda del barrio San Carlos donde fue ultimada la adolescente en marzo pasado.

Además de Monteros,  en barrios como Villa Luján, Yerba Buena y Aguas Corrientes habría jóvenes que se dedican a consumir esta sustancia. Todos lo harían con la misma modalidad: el transa les prepara la sustancia y ofrece espacio dentro del quiosco que manejan para que la consuman. “No hay sectores sociales determinados, pero no creo que sea los más pobres porque hay dosis más barata que la ‘alita de mosca’”, reflexionó.

El comisario Jorge Nacuse, titular de la Dirección General de Drogas Peligrosas coincidió al señalar que ellos tampoco secuestraron esa droga, ya que se trataría sólo de una modalidad de consumo. “También es conocida como ‘cazando al dragón’, pero no es de consumo masivo”, destacó.




Recomienda esta nota: