Black Pan se quedó sin construcción después de la polémica del árbol

Luego de la polémica desatada por la tala de un árbol para que la hamburguesería Black Pan instale mesas en una vereda de Barrio Norte, la Municipalidad de San Miguel de Tucumán procedió a labrar un acta y colocar la faja de clausura en el local que no contaba con los permisos de obra.

Según informó el Director de Catastro, Juan Manuel Ledesma, esta mañana agentes municipales concurrieron a la obra ubicada en 25 de Mayo 724 y detectaron que se estaban realizando modificaciones que excedían el permiso otorgado por la repartición. La denuncia fue realizada por el escritor Carlos Duguech la semana pasada en el Dirección de Espacios Verdes, en Catastro y en las redes sociales, donde finalmente tomó trascendencia.

“La constructora pidió un permiso por refacción pero esta mañana se constató que no era un simple permiso el que necesitaban. Debido a que no presentaron la documentación correspondiente, se procedió al desalojo de los obreros del local, se colocó la faja de clausura y se labró el acta correspondiente”, explicó el funcionario.

La multa que recibirá la empresa constructora será definidas por el Tribunal de Faltas municipal en base a la superficie cubierta del emprendimiento. La sanción contra la empresa será doble: primero, por no contar con el permiso correspondiente para construir y segundo, por dañar el ejemplar de liquidámbar de 35 años que era un bien público de todos los vecinos.

“Es obligación de los constructores presentar en los plano la vegetación que existe en el terreno donde se va a emplazar la obra”, informó el Titular de Catastro. “El árbol que fue derribado aparece en los planos que tenemos, por lo que no había autorización para su tala”, argumentó Ledesma, quien adelantó que iniciará las actuaciones necesarias para reponer el daño ocasionado con un árbol de similares características en esa vereda.