Culturas
tendencia
El Gaming se decanta por los dispositivos móviles
Siguiendo una tendencia que se estaba acentuando en los últimos años, el móvil es la herramienta más utilizada para jugar por parte de la población mundial. Actualmente, aglutina el 50% de las ventas de juegos en el mundo (92 mil de los 184 mil millones de dólares del mercado actual). Lejos quedan las consolas y el PC, con un 28% y un 21%, respectivamente. Estos datos tienen cierta lógica, teniendo en cuenta el papel que ha adquirido este aparato dentro del ocio digital. A fin de cuentas, tres cuartas partes de los habitantes del mundo (mayores de 10 años) tienen un móvil. El 95% en el caso de los países del primer mundo.
Esta herramienta va siempre con nosotros. Está disponible en los ratos libres y en cualquier lugar. Ha evolucionado tanto que, hoy, la calidad gráfica tiene poco que envidiar a la de los juegos de consola. Mejores procesadores, memoria o pantalla tienen mucha responsabilidad en ello. También las nuevas redes de datos móviles, que permiten mayor velocidad y menos latencia. Gracias a estos avances y al estudio de las costumbres de los usuarios, las desarrolladoras han multiplicado, exponencialmente, la oferta de juegos disponibles para estos dispositivos, dando lugar a una gran variedad de títulos. De esta forma, todo el mundo encuentra el entretenimiento que se ajusta a sus preferencias.
Pero los títulos diseñados exclusivamente para móviles son sólo una parte del catálogo que hoy podemos encontrar. Los creadores de algunos de los videojuegos más importantes de la actualidad (y, en algunos casos, dominadores de la escena de los eSports, tan de moda en nuestros días) ya se han dado cuenta del potencial de este entorno. Es el caso de Riot Games y su juego estrella, el League of Legends. A finales de 2020, la compañía lanzó, al albor del éxito de LOL, la versión modificada para móvil conocida como League of Legends: Wild Rift. Aunque, inicialmente, hubo cierto descontento entre los fanáticos de la versión de PC, por las evidentes diferencias, con el tiempo este título se ha hecho un lugar en el universo Gaming.
Antes de la maniobra de Riot, Activision ya había sacado al mercado COD Mobile, la adaptación de su icónico juego Call of Duty al universo de estos dispositivos. Fue todo un éxito de descargas (y aún lo sigue siendo). Siguiendo el ejemplo de sus competidores, y del éxito propio con Wild Rift, Riot Games lanzará, en breve, Valorant Mobile. Esta versión de su “shooter” estrella va a estar lista para dentro de pocos meses, según apuntan varios medios especializados. Recordemos que estamos hablando de uno de los títulos principales de los eSports, que mueve un importante seguimiento, tanto en materia de audiencia, como en actividad de pronósticos para sus principales eventos, como los Challengers o los Valorant Tours. Este salto al móvil abrirá una nueva vía, también en los deportes electrónicos, para convertirlo en el “shooter” de referencia, con perdón de COD o CS:GO.
Es obligatoria la referencia a algunos juegos que, siendo diseñados específicamente para móvil, han acabado triunfando en el universo de los eSports. Nos referimos, por ejemplo, a PUBG Mobile o Free Fire. En el caso del segundo, llegó a ser el protagonista del evento con más espectadores punta de 2021. En el 2022, el Mobile Legends: Bang Bang, un MOBA, se situó, gracias a sus MPL Indonesia, en segundo y tercer lugar de los torneos más seguidos. Sólo por detrás del todopoderoso League of Legends y su LOL Worlds 2022.
En definitiva, el asalto de los móviles al universo Gamer parece absolutamente consolidado. Y se ha producido de una forma progresiva. Acelerada, pero natural. Es casi imposible para las consolas competir, en términos cuantitativos, con una herramienta que los usuarios llevan siempre encima y que, gracias a los avances técnicos, hoy ofrece todo tipo de posibilidades para poder jugar. El futuro, además, va a ofrecer todavía más innovaciones tecnológicas para estos dispositivos, con lo que tendremos acceso a juegos aún más completos y variados. La era del móvil en el juego es una realidad innegable.