26/12/2022

Sucesos

Policiales

Volverá a la cárcel por el robo de una motocicleta tras recuperar su libertad en octubre

"Dame todo, dame todo sino te mato" fueron las palabras que utilizó el condenado al momento de realizar el ilícito en el barrio San Cayetano.

La Unidad Especializada de Robos y Hurtos I del Ministerio Público Fiscal, a cargo de Diego López Ávila, logró la pena efectiva de siete años contra Walter Rubén Páez, acusado por el delito de robo calificado por haberse cometido con un arma (cuchillo), en carácter de coautor. El acuerdo arribado se dio a través de un juicio abreviado con la defensa del imputado y la conformidad de la  víctima.

“Lo han golpeado en diferentes partes del cuerpo, logrando desapoderarlo de su motocicleta y su teléfono. Destacando que el damnificado pudo recuperar se celular pero no su motovehículo. Hay que tener en cuenta que posee una condena anterior por lo que declaramos su reincidencia conforme artículo 50. El 12 de septiembre de 2012 se lo condenó a la pena de doce años de cumplimiento efectivo por el delito de homicidio en ocasión de robo. El 9 de octubre de este año salió del penal dando cumplimiento a esa anterior condena”, señaló la auxiliar de fiscal, María Paula Bellomio.


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Bellomio se refirió a los términos del acuerdo. Posteriormente, el juez interviniente homologó el convenio de juicio abreviado y ordenó el traslado de Páez al servicio penitenciario provincial desde su actual lugar de alojamiento (Comisaría IV).

El hecho

El 8 de noviembre del corriente año, siendo las 16:00 horas, un masculino se encontraba sentado en su motocicleta, marca Honda Stone de color gris, sobre la vereda de calle Thomas Edison al 400 del barrio San Cayetano. En esas circunstancias, Páez lo agarró del cuello mientras lo apuntaba con su cuchillo con la intención de asestarle puñaladas y al grito de: "Dame todo, dame todo sino te mato".

Posteriormente, se hizo presente otro sujeto no identificado y previo acuerdo de voluntades le exhibió un arma de fuego mientras le exigían que se quede quieto o le pegaban un tiro. En esos momentos, la víctima recibió golpes de puños y patadas. Al revisarle los bolsillos, el agresor le sacó el teléfono celular mientras el cómplice le pegaba con la culata del arma.

Finalmente, los sujetos huyeron a bordo del rodado sustraído pero cuando se inició la persecución por parte del personal policial, el acusado saltó de la motocicleta. Allí se le cayó el celular y quedó aprehendido para luego ser trasladado a la Comisaría IV.




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