El mundo
El dueño de una clínica de inseminación confesó que muchos de los niños fueron hijos suyos
Un escándalo se desató en los últimos días en Holandam, cuando salió a la luz que el médico fundador de una reconocida clínica de inseminación artificial sería padre de una gran cantidad de niños concebidos de 6.000 mujeres que se sometieron al tratamiento.
La clínica Bijdorp abrió sus puertas en 1980, en Róterdam. En poco tiempo se convirtió en uno de los centros de fertilidad más importantes de Holanda, y se calcula que unas 6.000 mujeres fueron madres de unos 10.000 hijos tras ser inseminadas allí.
El médico Jan Karbaat, su fundador, murió en abril a los 89 años, en medio de un escándalo fenomenal porque autoridades sanitarias comprobaron que mezclaba el semen de varios hombres para aumentar las posibilidades de embarazo, algo que está prohibido. Es por eso que cerró la clínica en 2009.
Quién impulsó la investigación fue Joey Hoofdman, uno de los hijos concebidos por este preocedimiento, según reprodujo Infobae. Poco después se dio cuenta que era hijo del fundador de la clínica y todo empezó con una fotografía de juventud de Karbaat: eran casi idénticos.
Hoofdman se puso en contacto con varias mujeres que se habían tratado en el lugar y las sospechas se fueron acumulando. Muchas de las pacientes reconocieron que el médico iba a buscar semen fresco minutos antes del procedimiento de inseminación. Hoy todo hace pensar que el semen era suyo.
Finalmente, la Justicia autorizó la realización de pruebas de ADN a Hoofdman y a otras 17 personas. Los resultados confirmaron que Karbaat era el padre.
El próximo 2 de junio se resolverá el pedido para hacerse pruebas de ADN de otros 25 jóvenes que tienen sospechas sobre su origen. Una de ellas es Moniek Wassenaar, una psiquiatra de 36 años que, tras ponerse en contacto con una hija reconocida del médico, logró tener una conversación con él poco antes de su muerte.
"Me dijo que le hacía un servicio a la humanidad donando su semen y que por lo menos había unos 60 hijos suyos por el mundo", le confesó.