14/08/2018

Argentina

General Motors suspende a 1500 operarios y Motomel a 450

Ante la caída en las ventas, la automotriz estadounidense y la conducción de Smata Rosario acordaron un esquema de suspensiones en la planta de General Alvear, que afecta a 1.500 trabajadores. En tanto, la fábrica de motos Motomel ubicada en San Nicolás, concretó la suspensión de 450 empleados de un total de casi 600.
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El presidente en la planta de GM de Rosario en 2016.

Para evitar despidos ante la fuerte caída del mercado interno, la automotriz estadounidense General Motors y la conducción de Smata Rosario acordaron un esquema de suspensiones en la planta de General Alvear que afecta a 1.500 operarios, señala el portal Mundo Empresarial.

Fuentes del gobierno de Santa Fe y del sector automotriz informaron a BAE Negocios que se acordó la suspensión de tareas durante siete días al mes, hasta diciembre próximo. Los 1.500 trabajadores directos cobrarán esos días el 80 por ciento del sueldo de bolsillo.

En tanto, en la planta de motos Guerrero, ubicada en la localidad de San Lorenzo, se redujeron las horas de trabajo, y los empleados cobrarán, por las horas no trabajadas, el 75 por ciento del monto correspondiente. "Se trabaja sobre la base de que no haya despidos de ningún modo y en lo posible, tampoco suspensiones. En este caso, fue un acuerdo privado pero la provincia los monitorea en forma permanente", señalaron desde el Ejecutivo santafesino.

En este escenario de crisis general, en la provincia de Córdoba las terminales Renault e Iveco pusieron en marcha hace unos días cronogramas de suspensiones de trabajadores durante agosto, ante la fuerte caída de ventas de automóviles y camiones.

Por otro lado, desde principios de agosto, la fábrica de motos Motomel, ubicada en la ciudad de San Nicolás, concretó la suspensión de 450 trabajadores, de un total de casi 600, indica Mundo Gremial.

Fabián Gigli, delegado de la UOM San Nicolás, expresó que después de la mega devaluación el sector automotriz todo entró en una grave crisis y que “actualmente estamos teniendo una suspensión de 450 compañeros. Habíamos resuelto la situación con un adelanto de vacaciones, pero esa situación ya no está más, y ahora acordamos que la empresa abonará una semana de las dos que no se trabajará”.

Del 21 al 31 de agosto los trabajadores estarán con suspensión de actividades y al comenzar septiembre volverán a reunirse con la empresa para resolver cómo continuará la situación. “La prioridad es siempre sostener los puestos de trabajo de los compañeros y ver si con el cambio de estacionalidad hay alguna mejora en el mercado o algún cambio en la macro economía que reactive un poco el sector”, detalló Gigli en diálogo con Radio La Plata.

El delegado de la UOM explicó que el mercado se cae por el encarecimiento del financiamiento, y “porque en situaciones de crisis la prioridad de la gente pasa por otro lado, no son rubros prioritarios para el consumo”. (Mundo Empresarial; Mundo Gremial)






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