Ciro invitó a un ex Los Piojos a su show de Vélez y estalló la ilusión de los fans

“Solo te pido que se vuelvan a juntar”. El clamor de los nostálgicos seguidores no tiene un destinatario específico ni se limita a una banda en particular; es más un gesto de reverencia al pasado que una queja sobre el presente. Este deseo vale tanto para los shows de Indio Solari o Skay Beilinson, recordando a Los Redondos, como para los de Ciro y Los Persas, en honor a Los Piojos. Hace 14 años que la banda de El Palomar se separó, y desde entonces, sus seguidores sueñan con el regreso de la banda o al menos un último encuentro.

Andrés Ciro Martínez, cada vez más consolidado en su proyecto con Los Persas, se presentó este sábado en el Estadio Vélez, con todas las localidades agotadas, tal como había ocurrido un año atrás. En su repertorio, lleno de guiños a los viejos "piojosos" con canciones como "Angelito", "Llevatelo", "Cruel" y la no tan habitual "Motumbo", se acercó al final del espectáculo y presentó a un antiguo compañero que desató una explosión inmediata en la audiencia.

"Voy a invitar a un viejo amigo para que cante una canción que él escribió", anunció Andrés antes de mencionarlo por su nombre: "Piti Fernández". La mención al guitarrista de Los Piojos, con quien había tenido desacuerdos públicos después de su partida de la banda y su posterior separación, sorprendió y provocó un coro inmediato de miles de seguidores, expresando su deseo con el grito característico.

La canción elegida fue "Bicho de ciudad", uno de los éxitos de "Civilización", el último álbum de estudio de Los Piojos lanzado en 2007. "Quiero dedicárselo a la madre de Ale, a quien le gustaba mucho esta canción", mencionó el cantante en referencia a la madre de su hijo menor. Ciro abrazó al compositor del himno, un abrazo esperado por todos los "piojosos", y comenzó a tocar la canción. Piti cantó las partes del estribillo, interactuó con los guitarristas de Los Persas (Juan Gigena Ábalos y Rodrigo Pérez), y la emoción estaba a flor de piel. Ciro, naturalmente, lideró con su voz y acompañó con la percusión. Los seguidores la cantaron más fuerte que nunca, algunos con lágrimas, sintiendo que estaban haciendo un esfuerzo conjunto para hacer realidad sus deseos.

"Gracias Ciro, gracias Persas", expresó Piti al finalizar, señalando al anfitrión, a su manager y a su banda. Sin embargo, no se fue y tomó su guitarra eléctrica para tocar otro de los éxitos recientes de Los Piojos, "Pacífico". Finalmente, se produjo el abrazo que había esperado durante 15 años, y el concierto continuó según lo planeado. El destino de este reencuentro es incierto, nadie sabe a dónde llevará.

Daniel Piti Fernández dejó Los Piojos en septiembre de 2008, después de casi 20 años en los que se convirtieron en uno de los grupos más influyentes del rock argentino. La banda anunció su partida en un comunicado oficial en su página web: "Queridos Piojosos: Queremos contarles algo que ha estado circulando como un rumor y es importante que lo sepan de primera mano, sin intermediarios: Piti Fernández dejó la banda", detallaba el comunicado. "Su decisión fue dolorosa para todos nosotros y, de alguna manera, sorprendente. Pero, contrario a lo que algunos pueden pensar, todo está bien entre nosotros. Eso es lo más importante. Según lo que Piti nos dijo, planea continuar en la música con otro proyecto. Le deseamos lo mejor".

El proyecto al que se refería es La Franela, la banda con la que Piti lanzó cinco álbumes. Menos de un año después, Los Piojos dieron su último concierto, también de manera sorpresiva, el 30 de abril de 2009. Cada uno de los músicos siguió su propio camino, con algunos roces públicos, algunos reencuentros y la trágica muerte del guitarrista Gustavo Kupinski en 2011 en un accidente automovilístico. A partir de esta noche, quizás comience un nuevo capítulo.