11/08/2021

Sucesos

HORROR

Estremecedor relato de un joven que denuncia a un entrenador de básquet infantil por abuso sexual

La víctima hoy tiene 34 años, y a través de una publicación en su cuenta de Facebook, reveló el infierno que vivió cuando era niño. Mirá los detalles del caso.

Un caso conmueve a toda la comunidad santiagueña. En la Justicia y de manera formal en primera instancia, y a través de las redes sociales posteriormente, un joven denunció a un profesor de básquet infantil por abuso sexual.


Según el estremecedor testimonio de la víctima, los vejámenes se dieron cuando tenía entre 6 y 10 años. Actualmente, cuenta con 34 años.

"Mi profesor abusó de mí en tres ocasiones", aseguró. Detalló que la primera vez fue atacado al término de un partido de básquet. El profesor lo trasladaba en bicicleta, junto a otros niños, pero en el camino se desvió del grupo. En un predio abandonado habría ingresado al niño en un galpón y lo habría sometido hasta que fue interrumpido por el arribo de una persona. El denunciante reveló que en ese momento, el acusado lo vistió y lo condujo hasta cerca de su casa. En todo momento, la víctima se mantuvo paralizada por lo que estaba viviendo.

En la segunda ocasión, explicó que el profesor le indicó que fuere a entrenar de siesta, pero llamó al resto de los chicos una hora más tarde. El acusado lo condujo a su oficina. Allí, otra vez habría comenzado a abusarlo y al escuchar que llegaba alguien se frenó y llevó al niño hacia un salón en que se practicaba baile folclórico, donde lo ocultó. Mientras el niño permanecía paralizado oculto tras un tablón, el profesor habría hecho ingresar a otro hombre con el que comenzaron a mantener relaciones sexuales, lo cual fue aprovechado por el menor para escapar.

La tercera vez, el niño habría sido trasladado por el profesor en bicicleta hacia un descampado cerca del puente carretero, entre la Costanera y el Río Dulce. Allí, otra vez lo habría abusado y luego lo condujo hasta su casa y le habría dado dinero.

El denunciante cuenta con el patrocinio de los abogados Macarena Barrionuevo y Gabriel Coronel Chalfón.




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