Caso Fernando Báez Sosa: ¿Cuáles son las penas que podrían recibir los acusados?

A las 1 PM se dará a conocer el fallo en el juicio contra ocho jugadores de rugby acusados del asesinato de Fernando Báez Sosa, ocurrido en Villa Gesell en enero de 2020. Mientras se acercaba la fecha, la frase "Justicia es Perpetua" se repetía frecuentemente. 

Sin embargo, hacer justicia no siempre significa imponer una pena perpetua. El tribunal en Dolores dictará su sentencia basándose en cuatro opciones, dependiendo de cuán bien se ajusten a las demandas presentadas por el grupo de abogados de la familia de Báez Sosa, dirigido por Fernando Burlando, y el grupo de defensa liderado por Hugo Tomei.

Prisión perpetua por homicidio doblemente agravado: tiene una única pena de 35 años de prisión

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La primera opción, solicitada por el ministerio fiscal y la acusación particular, es la de imponer una pena de prisión perpetua por el delito de homicidio agravado en dos ocasiones. 

Los abogados Fernando Burlando y Fabián Améndola han argumentado que los ocho jugadores de rugby son coautores del asesinato y habrían conspirado para matar a Fernando, actuando todos con mala intención. En este escenario, la pena máxima sería de 35 años de encarcelamiento.

Homicidio doloso: los rugbiers tendrían una pena de 8 a 25 años

El segundo posible resultado para los acusados es el de ser considerados responsables de un homicidio intencional. Esto significa que los imputados eran conscientes de que sus acciones podrían llevar a la muerte de Fernando, pero no hicieron nada para evitarlo.

En esta situación, la pena podría variar entre 8 y 25 años de prisión, y se podrían aplicar gradaciones en las penas para cada uno de los imputados dependiendo de su grado de participación en el crimen. Esta opción se alejaría de las demandas de la defensa y estaría más cercana a lo que intenta lograr Hugo Tomei.

Homicidio preteritencional: los rugbiers tendrían una pena de 3 a 6 años

Otra alternativa que sería favorable para los acusados es ser considerados responsables de un homicidio accidental. Esto significa que a pesar de que se produjo la muerte de Báez Sosa, no había intención de causar su fallecimiento. La pena en este caso oscila entre 3 y 6 años, y sería un logro importante para el abogado defensor.

Homicidio en riña: los rugbiers tendría una pena de 2 a 6 años

El Tribunal de Dolores también está considerando la posibilidad de un homicidio en una pelea. En estos casos, no se puede determinar quién causó la muerte. Por lo tanto, aunque se aplicaría la misma pena a todos los acusados, la pena oscila entre 2 y 6 años.

Aunque el tribunal puede elegir cualquier alternativa, resulta dudoso que los ocho rugbiers se hayan reunido y hayan planificado matar a Fernando Báez Sosa. Es posible que hayan causado lesiones con la intención de hacerle daño, pero que la situación terminara en un desenlace fatal.

Si los magistrados optan por la pena de homicidio simple, que implicaría una graduación de las penas para cada acusado, no sería una decisión fuera de lugar.