09/01/2023

El mundo

Golpe de estado

Intento de golpe de Estado en Brasil: caos y destrucción

Seguidores de Bolsonaro invadieron este domingo las sedes del Parlamento, la Presidencia y la Corte Suprema de Brasil.

Luego de la vuelta a la presidencia de Brasil de "Lula" da Silva hubo muchas respuestas negativas por quienes apoyaban a Jair Bolsonaro. Pero nadie imaginaba que podría ocurrir lo peor. 

En las últimas horas, empezaron a circular noticias de que los bolsonaristas invadieron este domingo las sedes del Parlamento, la Presidencia y la Corte Suprema de Brasil en un intento de golpe de estado.

La invasión empezó en el Congreso, cuando miles de los seguidores del ex presidente pudieron burlar el bloqueo de seguridad. Luego irrumpieron en la sede del Legislativo y destruyeron el Salón Noble del recinto. Además hicieron destrozos con sillas, mesas, impresoras, cuadros, televisores quebrados y pedazos de equipos y muebles quedaron esparcidos en las afueras y pasillos del Congreso.

Obras de arte en el suelo, ventanales rotos y equipos y muebles destruidos fue el rastro del caos dejado. “Fue algo que nunca imaginé ver. Es depredación, vandalismo, caos y destrucción”, manifestó en un video con las imágenes de los locales invadidos el ministro de la Secretaría de Comunicación del Gobierno, Paulo Pimenta.

El segundo piso del Palacio do Planalto fue totalmente destruido y los manifestantes radicales llegaron hasta el pasillo que conduce al despacho del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en el tercero. 

Fuentes de la Presidencia, sin embargo, indicaron a EFE que la sala del gobernante no fue invadida por los simpatizantes del ex presidente Jair Bolsonaro, que no aceptan la derrota en las urnas del pasado 30 de octubre y piden un golpe de Estado de los militares.

No obstante, la sala de la primera dama, Rosângela “Janja” da Silva, fue destruida, como registraron fotografías exhibidas por medios locales. “Esto es una cosa criminal. Son obras de arte, caos y caos. Es increíble lo que pasó aquí en el Palacio. Miren el estado de las salas. Son antisociales que tienen que ser tratados como criminales porque lo hicieron contra la democracia y Brasil”, afirmó Pimenta.

“Eso jamás podría haber sucedido. No podemos aceptar la impunidad y aquellos que desprecian la democracia tendrán que ser responsabilizados criminalmente”, aseveró Pimenta, también diputado federal. La fachada del Ministerio de Justicia tampoco escapó a los actos violentos antidemocráticos y algunos artículos exhibidos en las recepciones de los edificios públicos fueron saqueados por los invasores.

Las banderas de los 27 estados, que decoran uno de los pasillos del Congreso, fueron llevadas por los manifestantes, que en su paso destruyeron las salas del primer piso ocupadas por algunos de los parlamentarios. Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, decretó este domingo la intervención del Distrito Federal de Brasilia.

El decreto de intervención federal en el Distrito Federal regirá hasta el 31 de enero de 2023. La intervención se limitará al ámbito de la seguridad pública. Lula, quien está de visita en el interior del estado de Sao Paulo, no se encontraba este domingo en Brasilia.

El mandatario nombró como interventor a Ricardo Capelli, secretario general del Ministerio de Justicia, quien será el responsable de toda el área de Seguridad en la capital hasta el próximo 31 de enero y estará subordinado directamente al presidente. Con la intervención, los órganos de Policía de la capital pasan a estar controlados por el interventor, que a su vez solo responde ante Lula.


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Por otra parte, Lula afirmó que que los “vándalos fascistas” que invadieron las sedes del Parlamento, el Supremo y la Presidencia, en Brasilia, serán “encontrados” y “castigados”. El mandatario progresista calificó de “barbarie” los graves altercados vividos hoy en la capital brasileña por parte de radicales de la extrema derecha que exigen una “intervención” militar.

Además, Lula responsabilizó de los incidentes al ex presidente Bolsonaro, de quien dijo que alienta a sus seguidores a través de las redes sociales. Agregó que los radicales han sido “estimulados” por el ex gobernante y que “pagarán con la fuerza de la ley” por los disturbios provocados.

Cerca de 200 personas, según el ministro de Justicia, Flavio Dino, fueron detenidas por las autoridades y deberán responder ante la Justicia por los actos violentos de invasión y depredación de bienes públicos.




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