El clan Macri se beneficia de la lenta acción de la Corte Suprema

La Corte parece estar tomando una decisión particular, que es impugnar únicamente a candidatos peronistas. Esto se sugiere después de que rechazaran tratar, durante el receso judicial, los amparos presentados contra la candidatura de Jorge Macri para jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. 

Los miembros del máximo tribunal argumentaron que aún están de vacaciones y que el caso central todavía está pendiente en el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) porteño. Sin embargo, hay que destacar que las elecciones primarias (PASO) están a solo diecisiete días de distancia.

El candidato seleccionado por el PRO para reemplazar a Horacio Rodríguez Larreta, Jorge Macri, enfrenta críticas porque se cuestiona si cumple con los requisitos establecidos por la Carta Magna de la Ciudad, ya que no es originario de la CABA (nació en Tandil) y no ha residido en el distrito durante los últimos cinco años previos a la fecha de la elección. 

Esto se debe, en parte, a que ha sido intendente de Vicente López desde 2011. Sin embargo, el TSJ no entró en el debate de fondo y le dio luz verde a la candidatura de Macri basándose en un tecnicismo: argumentaron que aquellos que presentaron impugnaciones debieron hacerlo ante la Junta Electoral de Juntos por el Cambio.

Después de la decisión del tribunal porteño, Nito Artaza y Vanina Biasi intentaron acelerar el proceso presentando un amparo ante la Corte Suprema. Sin embargo, Horacio Rosatti, quien está de vacaciones, no mostró intención de abordar el asunto durante esa semana. 

Mientras tanto, el TSJ otorgó a las partes diez días para apelar su sentencia. Este plazo vencería la próxima semana, y los recurrentes también podrían llegar hasta la Corte mediante el recurso extraordinario. El tiempo apremia debido a que las elecciones son el 13 de agosto.

Vanina Biasi afirmó: "Por supuesto que llevaré mi caso hasta la Corte Suprema de Justicia, porque quiero seguir adelante, porque tengo razón y porque no se pueden aplicar reglas diferentes para que todos podamos participar en la misma contienda electoral". 

"Llegaré hasta el final porque de esta manera logro evidenciar las fallas de un Poder Judicial que, cada vez que tiene que responder, muestra su dependencia política de la facción que gobierna la Ciudad desde hace 16 años", expresó en sus declaraciones a este diario después del fallo del TSJ.

TSJ: Un vestido amarillo

El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) cuenta con una mayoría automática afín al macrismo, representada por Weinberg de Roca, Otamendi y de Langhe. Weinberg de Roca, quien es compañera de gimnasio de Mauricio Macri, fue su elección para ocupar el puesto de Procuradora General después de que su gobierno lograra la renuncia de Alejandra Gils Carbó.

Además, la jueza también formó parte de la comisión de expertos designada por Alberto Fernández para proponer una reforma del Poder Judicial, aunque esta iniciativa finalmente no prosperó. Por su parte, Otamendi se unió al TSJ durante la última etapa del gobierno de Cambiemos.

Anteriormente, había ocupado el segundo cargo en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos bajo la dirección de Germán Garavano. Según el diario La Nación, Otamendi formó parte de lo que se conoció como la "mesa judicial" del macrismo.