"Jaldo es un traidor y está desequilibrado", dice Luis Romano

La crisis en el peronismo tucumano se agudiza y el distanciamiento entre el gobernador Juan Manzur y el vicegobernador Osvaldo Jaldo parece llegar a un punto sin retorno.

En ese marco, las agrupaciones internas del peronismo van tomando posición y la más dura está a cargo del Movimiento de Unidad Popular (MUP) que conduce el dirigente Luis Romano quien no se ahorra epítetos a la hora de calificar a Jaldo y ratitificar su respaldo a Manzur.

A raíz de la decisión del presidente de la Legislatura de anular contratos de gente que pertenece a sectores del manzurismo, Romano asegura que es una decisión despojada de "toda sensibilidad social, de todo sentimiento peronista. Recuerdo que este hombre que a lo largo de su carrera ha ocupado encumbrados cargos en nombre y gracias al peronismo, se encuentra aliado a la oposición para desgastar a Juan Manzur. Al mismo Juan Manzur al cual, hasta hace pocas semanas, juraba lealtad y llamaba su conductor".

Además, Romano advirtió a los dirigentes que aún acompañan a Jaldo que no se trata de un conductor: "es un patrón de estancia que está acostumbrado a arriar vacas y no se olviden que a las vacas cuando las arrean, las llevan al matadero".

En otro orden, Romano, quien actualmente ocupa la representación en Tucumán de la Comisión Nacional Regulación del Transporte (CNRT) aseguró que Jaldo "está desequilibrado y cegado por su ambición de poder. No sé si los años le habrán pegado mal pero está en una situación de traición al movimiento peronista".

"No le queda otra calificación que la de traidor a aquellos dirigentes que trabajaron bajo el sol y bajo la lluvia para que pudiera ser vicegobernador de Manzur", finalizó Romano.

Paralelamente, en las calles de Tucumán se multiplican las pintadas en contra de Jaldo quien está tejiendo una alianza desde la legislatura con sectores del macrismo y del bussismo.