"Peor que el vacunatorio VIP”: brutal editorial de Marcelo Longobardi

En su editorial de Cada Mañana, por Radio Mitre, Marcelo Longobardi se refirió al DNU que habilita la llegada de las vacunas norteamericanas a la Argentina.

"Si ha habido escándalos durante la pandemia en Argentina, el más visible había sido el del vacunatorio VIP, no tengo ninguna duda de que lo ocurrido respecto al DNU para la llegada de vacunas fue bastante más escandaloso por su dimensión sanitaria y política", comenzó.

"La doctora Vizzotti declaró otra vez una obviedad. Dijo que “el piso de casos es muy alto y que con el invierno por delante, con las variables más transmisibles, si empiezan a aumentar los casos es un problema, un riesgo grande”", indicó.

Añadió que "las aerolíneas dicen que “traer a los argentinos varados podría tardar cinco meses”. Joaquín Morales Solá dijo que “el Gobierno argentino ha llegado al absurdo de impedir que los argentinos regresen de lugares con menos posibilidades de contagios que en su propio país”. Hoy en Miami hay 290 contagios por día y en un avión entran 300 personas. En esta línea disparatada se suma el gobernador Insfrán que cobra un peaje para entrar a la provincia de Formosa".

Longobardi aseveró: "El Presidente el viernes a través de un decreto modificó la ley de vacunas que incluía la palabra negligencia para obturar la llegada a la Argentina de la bendita vacuna de Pfizer después de que se dijo de todo. Después de ocho meses de una discusión inverosímil el Presidente modificó el asunto por decreto. A partir de ahora podrán eventualmente entrar las vacunas norteamericanas de Jansen, Moderna y Pfizer. Yo tengo la impresión que esto se hizo sólo para evitar otro bochorno más que era la imposibilidad de que EEUU nos done vacunas".

Sumó que "este episodio del decreto viene a consagrar el escándalo más importante que la Argentina ha presentado durante la pandemia. Mucho más escandaloso que el caso de González García, Verbitsky y el vacunatorio vip". "Esto es un escándalo que ha costado muchas vidas y que ha tenido como denominadores comunes cuestiones geopolíticas, las relaciones de la señora de Kirchner con los rusos y con los chinos, la falta de determinación del Presidente y el hecho de no concederle a la oposición la idea de que era destrabable en el congreso la bendita ley", explicó.

Y finalizó: "Los diputados y los senadores del Gobierno que preside Alberto Fernández se negaron a modificar una ley, por eso el presidente tuvo que hacer un decreto. Ese decreto consagra un escándalo de proporciones descomunales".