Condena de los rugbiers: un mes después, ¿cómo es su día a día en prisión y en qué cárceles cumplen su pena?

Después de un mes de las condenas impuestas a los ocho rugbiers que asesinaron a Fernando Báez Sosa, su relación ha cambiado drásticamente. Anteriormente, mostraban unidad y habían establecido un pacto de silencio, pero ahora hay dos grupos claramente diferenciados. 

Aunque actualmente todavía residen en la alcaidía de Melchor Romero, están a la espera de conocer su destino final. Sin embargo, tras la emisión del fallo definitivo del Tribunal de Dolores, su relación se encuentra en peligro, ya que las peleas son cada vez más frecuentes.

El grupo se enfrentó en dos oportunidades a Máximo Thomsen, quien fue considerado como "el líder" de los homicidas y aquel que "más golpeó" a la víctima. Según testigos, hubo una pelea en la que intercambiaron insultos y finalmente llegaron a las manos. 

Thomsen resultó ser el más afectado, mientras que uno de los acusados le recriminó haberlos hundido a todos. Uno de los principales motivos de la discordia fue el comportamiento del abogado Hugo Tomei, quien según los implicados, hizo un trato con Thomsen para favorecerlo en el juicio, provocando así que los otros acusados recibieran "una pena mayor".

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Debido a estos repetidos enfrentamientos, la justicia ha determinado que deben ser separados. El primero en abandonar será Matías Benicelli, quien cumplirá su sentencia de por vida en la cárcel de Campana.

Después de la conclusión del juicio en Dolores, los condenados mostraron signos preocupantes de un estado psicológico y de salud mental alarmantes, lo que llevó al Servicio Penitenciario a tomar medidas de precaución para evitar posibles "autolesiones". 

Según fuentes penitenciarias, "los ocho están bajo supervisión para proteger su integridad física debido a su depresión", y existe el temor de que intenten suicidarse. En este sentido, se ha hecho pública una carta escrita por Thomsen desde la prisión, en la que explica que "sufre de claustrofobia" y pide disculpas por los ruidos que hace al golpear las paredes y puertas. 

Thomsen es uno de los jugadores de rugby que ha mostrado mayores síntomas de depresión y ataques de ira. Según informes, solo logró calmarse después de ser visitado por un pastor, quien le entregó una Biblia para su lectura.

¿En qué cárcel están los rugbiers y a dónde irán?

Los ocho condenados actualmente están detenidos en la cárcel de Melchor Romero, mientras que sus familias esperan que sean trasladados al Complejo Penitenciario de Campana. Este lugar es atractivo para las familias de los condenados por su cercanía con Zárate, su ciudad natal, y por la presencia de dos personas conocidas por ellos: Matías Pertossi (hermano de Lucas) y la hermana de Enzo Comelli, quien trabaja como guardia. 

Según los informes, Benicelli será el primero en ser trasladado, seguido por Ciro Pertossi. Ambos fueron condenados a cadena perpetua por el delito de "homicidio doblemente agravado por alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas".

Debido a la gravedad de sus delitos, se esperaba que los condenados fueran trasladados a una prisión de máxima seguridad, excepto aquellos condenados como "partícipes secundarios": Blas Cinalli, Ayrton Viollaz y Lucas Pertossi. Sin embargo, se espera que solo Thomsen sea trasladado a una prisión diferente, como la de San Martín, que está a una hora en automóvil desde Zárate, según fuentes consultadas por Infobae.