15/07/2018

Deportes

De Rusia con Pasión

Los presidentes de Francia y Croacia quedaron bajo la lluvia durante la premiación

El único paraguas fue para Putín, el anfitrión que no resultó muy hospitalario con sus invitados de honor.
Los presidentes de Francia y Croacia quedaron bajo la lluvia durante la premiación | El Diario 24 Ampliar (1 fotos)

Putín fue el único mandatario para el que hubo paraguas.

Francia se consagró campeón del Mundial de Rusia 2018 al derrotar por 4 a 2 a Croacia en la final, sin embargo la imagen de la tarde no fue de una escena deportiva sino de una mucho más curiosa.

Ocurrió cuando los futbolistas croatas recibían sus medallas por el subcampeonato, que una lluvia torrencial comenzó a caer sobre Moscú, empapando a los protagonistas. Entre ellos se encontraban los presidentes Vladimir Putín de Rusia, Kolinda Grabar-Kitarovic de Croacia y Emmanuel Macrón de Francia, además de las autoridades de la FIFA encabezadas por su presidente Gianni Infantino. Lo llamativo fue que apareció un solo paraguas y fue para el mandatario local, los demás quedaron todos empapándose bajo el chaparrón.

Minutos más tarde aparecieron los paraguas para el resto de los mandatarios quienes ya estaban cubiertos totalmente de agua.

La primera mandataria de Croacia compartió el palco junto con su par francés, Emmanuel Macron, y el presidente de la FIFA. El ambiente en la previa fue muy relajado, todos los invitados se mostraron exultantes, bromearon y hasta se sacaron fotos con sus parejas.

El placo de honor estuvo plagado de jefes de Estado de todo el mundo. Vladimir Putin invitó también a Armen Sarkisyan, de Armenia, Alexander Lukashenko, de Bielorrusia, Ali Bongo Ondimba, de Gabón, Igor Dodon, de Moldavia, Mahamoud Abbas, de Palestina, Sheikh Tamim Bin Hamad Al Thani, emir de Catar, donde se celebrará la próxima edición del Mundial en el 2024 y Omar Al Bashir, presidente de Sudán.

Por último, los días que Kolinda Grabar se tome en Rusia contarán como vacaciones sin goce de sueldo: confirmó que se descontará de su sueldo los días que no trabajó y que paga de su bolsillo el gasto de las entradas y los pasajes de avión que realiza en clase turista.




Recomienda esta nota: