Merkel visitó a Francisco y le regaló productos bien argentinos: alfajores y dulce de leche

La canciller alemana, Angela Merkel, mantuvo una audiencia privada con el papa Francisco y a la hora del tradicional intercambio de regalos, sorprendió al pontífice con productos típicos argentinos: dulce de leche y alfajores.

"Usted ya los conoce", le dijo Merkel a Francisco al entregarle una caja de alfajores marca Cachafaz y tres frascos de dulce de leche San Ignacio, productos que probablemente adquirió durante su visita de Estado a la Argentina, a principios de junio.

También le obsequió CDs musicales con las obras de Ludwig van Beethoven. El Sumo Pontífice vivió en Alemania en 1986 y maneja muy bien el idioma.

El Papa, por su parte, agasajó a la canciller alemana con una escultura con una rama de olivo. "Por el trabajo que hace por la paz", dijo Francisco, quien también le regaló tres de sus escritos. También le dio copias en alemán de sus documentos más importantes: la encíclica Laudato Sí, sobre el cuidado de la casa común, y las exhortaciones apostólicas Amoris Laetitia y Evangelii Gaudium.

El encuentro de este sábado entre Francisco y Merkel duró 38 minutos y tuvo lugar en la biblioteca del Palacio Apostólico. "Gracias por permitirme estar aquí de nuevo", dijo la canciller sonriente al saludar al jefe de la Iglesia católica.

Ambos líderes destacaron la "importancia del acuerdo de París" sobre cambio climático suscripto en 2015 y rechazado recientemente por Estados Unidos, remarcaron su compromiso con "un mundo multilateral" y repasaron la agenda de la próxima cumbre del G-20, que se realizará en julio en Hamburgo.

"Es un pecado que Estados Unidos haya salido de los acuerdos de París", dijo Merkel sobre la reciente decisión anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump.

Tras el encuentro, la jefa del Estado alemán contó que el pontífice le transmitió su pésame por el fallecimiento del ex canciller alemán Helmut Kohl, padre de la reunificación Alemania y mentor político de Merkel. Según la canciller, Francisco alabó a Kohl como un "gran hombre de Estado".