Atlético va por el "Zapallazo"

En el año 2004 Atlético Tucumán militaba con muchas penurias en el torneo Argentino A, cuando tuvo la posibilidad de lograr el ascenso al Nacional B en una Promoción que disputó ante la Comisión de Actividades Infantiles (CAI) de Comodoro Rivadavia.

En el partido de ida el conjunto patagónico se impuso de visitante en Tucumán, lo que obligaba a Atlético a ganar por dos o más goles en Comodoro para lograr el ascenso. Por aquellos días de junio casi ningún hincha decano confiaba en que se pueda lograr tan difícil hazaña, sin embargo el equipo de 25 de mayo y Chile se impuso por 1 a 0 y estuvo cerca en la última jugada del partido de lograr el ascenso.

"Casí mete el zapallazo Atlético", fue la frase comentada al otro día. El Deca no había podido concretar el ascenso, la CAI mantuvo la categoría gracias a la ventaja deportiva pero en los hinchas quedó la sensación de que la hazaña era posible. En los años siguientes llegaría finalmente el ascenso a la B y la llegada por primera vez a la máxima categoría, y tras un segundo ascenso a Primera finalmente Atlético tocaría en este 2017 el cielo con las manos, disputando por primera vez la Copa Libertadores con partidos que quedarán en la historia.

El resultado del cotejo disputado en la noche del miércoles en Bolivia dejó a Atlético tercero en su grupo, y con la necesidad de pegar un veradero "zapallazo" si quiere seguir en competencia. Ubicado tercero en la zona 5 y con sólo una fecha por disputarse, el conjunto tucumano tendrá que ir a ganar en Brasil y esperar que Jorge Wilstermann no gane en Uruguay ante Bolivia.

El empate de los bolivianos obliga al decano a ganarle por dos o más goles al conjunto paulista, mientras que una victoria del conjunto de Cochabamba dejará automáticamente afuera al Deca.

En el medio está el partido ante Colón por el torneo local, que de seguro pasará desapercibido para los hinchas decanos que esta vez, contrario a lo que pasaba en aquel 2004, tendrán todos sus pensamientos puestos en el difícil partido en Sao Paulo, que parece casi un milagro, pero en el año de las hazañas, de las victorias épicas y las gestas históricas, los zapallos crecen en cualquier baldío. ©eldiario24.com