La falta de cascos en las motos, no tienen excusas ni parentescos

Los lastimados, mutilados y muertos de la provincia de Tucumán, podrían ser muchos menos si se adoptara la sencilla medida que tomó el gobierno de Santiago del Estero hace unos años. Hizo procedimientos estrictos en los que se quitaba la motocicleta a quienes no llevaban casco. Parece mentira, pero fue una decisión revolucionaria. Los primeros días hasta quedaron de baja algunos policías que creyeron que no era con ellos la cosa. Fue revolucionario en pequeños pueblos de la extensa campaña santiagueña se hicieron los mismos trabajos, con el agravante de que los infractores debían ir a Santiago a pagar la multa para recuperar el vehículo. Y de inmediato, es decir, el mismo día que se puso en marcha la medida, hubo menos accidentados graves en la guardia del hospital Ramón Carrillo, el mayor centro de salud de la vecina provincia.

Al dar la vuelta una esquina, los azorados motociclistas se daban con que los esperaba una comitiva de una decena de policías, algunos con motos interceptoras, a la vez que advertían que no podrían volverse porque atrás y como quién no quiere la cosa, también había policías estacionados para prevenir la huida por la retaguardia. El camioncito que llevaba las motos secuestradas no daba abasto. Y el parque de vehículos secuestrados creció en forma exponencial.

Ninguna protesta arredró al gobierno de Santiago, que sigue con estos procedimientos, siempre severos, aunque cada vez más espaciados. Hoy la gente que lleva a sus hijos a la escuela, los transporta con casco. Si van dos en una motocicleta, chofer y acompañante lo tienen. No se hacen excepciones. No valen excusas ni el “solamente estaba dando una vuelta” ni “me lo olvidé” ni “soy hijo del concejal Fulano”. Nada.

En el medio llegaron las críticas. “¿Por qué no me obligan también a llevar una campera cuando hace frío?” Simple, porque el resfrío o la gripe te los curas vos, pero si chocas vas al hospital público que pagamos entre todos. “En un clima como Santiago, con 42 grados a la sombra, es criminal pedir casco”. Y sí, papito, también es malsano andar en autos sin aire acondicionado y nadie pide hacerlos descapotables. “Lo hacen porque los criticaron los del MotoGP”. Y sí, puede ser, pero sea por lo que sea, bienvenida la medida que te salvó de que te hicieran puntos en el marote, ¿no?

Después de varios años, los procedimientos de la policía para pedir el casco son cada vez más esporádicos. Nadie se arriesga a salir sin él, casi todos cumplen la obligación. Algunas veces, luego de toda una mañana de estar controlando un lugar, la policía se va con las manos vacías, no pescó a nadie en infracción. El uso del casco se generalizó de tal manera que hay muy pocas posibilidades de volverse (más) tonto al chocar, por no llevarlo. Aleluya, aleluya.

©Juan Manuel Aragón