Opinión
Ventajas del celular

Ventajas del celular
Instrucciones para usar el telefonito de mano con ventajas y de paso ser moderno y sentirse joven.
1 - Cada vez que se junte con un amigo, aproveche para marcarle a otra persona que no esté en el lugar. En cualquier momento de la conversación, pele el aparato, y hable a) con su proveedor, b) con su señora, c) con otro amigo o d) con un número al azar.
2 - En su casa, siéntese con el teléfono pegado a su mano derecha, en cualquier momento recibirá el llamado o el mensajito de un amigo. Ya sabe, su aparato y lo que dice la gente del otro lado de la línea, es más importante que su familia. De todas maneras, sus hijos y su señora estarán con sus propios aparatos en la mano, así que nadie se ofenderá porque todos estarán ahí y al mismo tiempo en otra parte.
3 - No olvide llevarlo si va a una entrevista de trabajo, es posible que alguien necesite decirle algo y debe estar disponible. Si suena, sin mirar al entrevistador, atienda nomás y hable en voz bien alta. Al cortar, mire a su interlocutor y pregunte: “¿En qué íbamos?”
4 - Si tiene una Número Dos, recuerde llevar consigo el aparato a sol y a sombra. Si a medianoche se levanta al baño, llévelo. Casos se han dado de ñatos que los descubrieron por dejarlo en la mesa de luz, creyendo que la Número Uno estaba dormida. Y no estaba, por desgracia.
5 - Revise a cada instante su aparato. Ha puesto en “modo silencio” a varios grupos de amigos y podrían estar diciendo algo importante justo en este momento. En el colectivo, en clases si es alumno o profesor, en su trabajo, en misa o en el culto, en el baño, en la calle, en el ascensor, en la cama, en la mesa del café con los amigos y cuando esté con la Número Dos, antes de y después de. Y por las dudas endemientras también.
6 - Lo que dicen sus amigos por el celular, merece toda la atención. Pero cuando esté con ellos en persona, acuérdese de que sus otros conocidos también quieren que usted los caiga en cuenta. No se descuide, en cualquier momento puede llegarle un chiste buenísimo por teléfono así se ríe solo, mientras avisa: “No les puedo mostrar porque hay menores”. Si al rato, alguien lo mira raro, digalé sin dejar de sonreír: “Perdón, me estoy riendo del meme que me mandaron hace un rato, imperdible”.
7 - Debe adherirse a todas las redes sociales, las conocidas y aquellas de las que no ha tenido noticias ni la abuela que crió a sus programadores, así está enterado de todas las huevadas que suceden en la red, la mayoría de las cuales son un invento para manejarle el cerebro, el cerebelo y el bulbo raquídeo y hacerlo comprar cualquier buzón, desde un candidato hasta la última de las fundas para celulares, con foquitos que se prenden y se apagan y colorcitos que son muy lindos, viera.
8 - Peléese con los amigos que no piensan lo mismo sobre política, religión, fútbol, gastronomía, arte egipcio, mal de ojo, etimología, filosofía aristotélica. Haga suyos los postulados del partido político de su preferencia y mida con esa vara al resto de la humanidad. Todo el que no piensa igual es un HDMRPMQLRP (traducido quiere decir “hijo de mil reputa madre que lo reparió”, pero nunca voy a saber por qué carajo no escriben toda la frase si es más contundente como insulto). Usted siempre tiene razón, ya sea que la conversación verse sobre teología, la bomba atómica, qué pasó en Cancha Rayada o cómo se llamaban los Reyes Magos, usted sabe que no fueron Melchor, Gaspar y Baltasar y tiene la justa. Siempre.
9 - Recuerde los tiempos en que no había estos aparatos y pregunte “¿cómo hacíamos para vivir sin celular ni internet?”. En esos tiempos los chicos jugaban a las escondidas, a la pilladita, a las estatuas, al papá y la mamá, a las muñecas, a los soldaditos, a las bolillas, con autitos, a las figuritas, hacían volantines en agosto, chupaban caña, a la pallana, a la rayuela, salían a hondear urpilas a la siesta o se bañaban en el canal, actividades de una infancia infeliz, que gracias a Dios terminaron para siempre. Ahora con el celular cualquiera recorre el mundo sin moverse de su silla y le pregunta cualquier cosa y ahí está la respuesta.
10 - Siempre que pueda, hable de marcas de aparatos, sus características, qué puede hacer el suyo, cuantos gigabytes de potencia tienen los nuevos, precios, cuotas y condiciones de pago. A la gente le encanta saber esos adorables dramas personales. Mencione el problema que ha tenido a), con el primero que compró, que no traía indicador de potencia de carga de la batería, b) con el anteúltimo, que no tomaba fotos con la claridad que requería usted, que es un experto fotógrafo de la naturaleza, c) con el actual porque se le cayó al inodoro y ahora no sabe si lo que sale en la pantalla es su selfie o un sorete nadador.
¿Amén?
©Juan Manuel Aragón