Un policía Bonaerense mató a un chico de 14 años en un supuesto asalto

Un policía Bonaerense mató a un adolescente de 14 años e hirió a otros dos menores que, según su versión, intentaron robarle en la madrugada de este martes cuando transitaba por la localidad bonaerense de Billinghurst, en el partido de San Martín, según publica Página 12.

El agente declaró que el menor fallecido sostenía un arma y le habría apuntado, por lo que decidió disparar con su pistola reglamentaria aunque no estaba de servicio. Sin embargo, no fue secuestrada ningún arma junto al cuerpo del menor. El policía fue detenido por exceso de legítima defensa.

Según el informe policial, el episodio ocurrió pasada la medianoche en la intersección de las calles Ocampo y José Hernández. Allí, el subteniente Hugo Daniel Pos caminaba con su ex pareja cuando habrían sido sorprendido por un grupo de adolescentes con intención de robo.

“Uno de ellos los intimida con arma de fuego mientras que los otros los revisan y le sustraen al efectivo policial un teléfono celular”, dice el parte de la policía y aclara que el oficial “en un momento logra extraer su arma reglamentaria bersa nro13-626605 y se identifica como policía comenzando a retirarse los sujetos y la ex pareja lo advierte al efectivo que lo estaban apuntando para tirarle por lo que se produce un intercambio de disparos”.

Como consecuencia del tiroteo, Rodrigo Correa (14) recibió un tiro en la cabeza y los otros dos chicos recibieron balazos en la pierna y en el abdomen. Ambos fueron trasladados al hospital Castex, donde tuvieron que ser intervenidos de urgencia y quedaron detenidos.

Desde la Policía Bonaerense confirmaron al citado diario que no se encontró ningún arma junto al cuerpo del menor baleado, aunque sospechan que “se la llevaron los otros”, en relación a dos sospechosos que habrían participado del robo y se encuentran prófugos. También confirmaron que el subteniente fue desafectado y detenido por orden del fiscal de menores Marcelo Brocca de la UFI juvenil de San Martín, que calificó el hecho como “exceso en la legítima defensa”.

Por lo pronto, altas fuentes en la Procuración bonaerense vinculadas al expediente aseguraron al portal Infobae que no solo la única arma encontrada hasta el momento es la Bersa del subteniente sino que los casquillos recogidos en la escena, a simple vista, corresponden únicamente a las balas disparadas por el policía. Los disparos, por otra parte, "no habrían sido hechos a corta distancia", asegura una voz de peso en los tribunales de San Martín.

“Mi hijo no conocía a los chicos que están detenidos por el robo. Iba caminando con dos compañeritos por la calle y dicen que el policía salió disparando a los tiros y ahí le dio en la cabeza”, contó Irma Mansilla, la madre del menor fallecido. “Lo dejaron ahí tirado como por tres horas. Fuimos a hacer la denuncia y nos dieron un papel escrito así nomás. Se miraban entre los policías, seguro que se van a lavar las manos, seguro van a decir que mi hijo tenía un arma”, agregó la madre en declaraciones al canal C5N.

Familiares y amigos de los jóvenes, enterados de lo ocurrido, se concentraron en el lugar del enfrentamiento y apedrearon a los peritos por lo que se debió reforzar la seguridad en el lugar. Otro grupo de personas llegó hasta la casa del policía, que vive en las inmediaciones e intentó incendiarla por lo que también se reforzó la seguridad frente a la vivienda con efectivos de la Jefatura Departamental de San Martín. (Página 12)