Caso de amenaza de bomba en el Santa Rosa: detienen al padre de una estudiante

Detuvieron al padre de una alumna del colegio Santa Rosa debido a la amenaza de bomba que ocurrió el 27 de julio en esa institución. Es la primera vez que un progenitor de una estudiante es detenido por intimidación pública antes de que un fiscal solicite la prisión preventiva. 

Hasta ahora, solo se habían enviado notificaciones a los sospechosos informándoles que debían comparecer en una audiencia de formulación de cargos al día siguiente. 

En este caso, la jueza Eliana Gómez Moreira, a pedido de Mariana Rivadeneira, la titular de la fiscalía de Delitos Complejos, ordenó la detención de Federico Paulino Ríos y el allanamiento de dos domicilios relacionados con él. Según la acusación, a las 9.30 de ese día, la recepcionista de la institución educativa recibió una llamada telefónica en la que un hombre dijo: "amenaza de bomba en el patio del colegio".

Siguiendo el protocolo, se involucró a la Policía y a los Bomberos. El informe telefónico reveló que la llamada provenía del padre de una alumna, lo que condujo a la identificación del acusado, que sería imputado en las próximas horas.

El abogado de Ríos, Arnaldo Ahumada, contactó a LA GACETA para expresar su desacuerdo con la orden de allanamiento y detención, considerándola excesiva. Argumentó que ese mismo día, la escuela había enviado un mensaje de WhatsApp a los padres informando sobre la amenaza de bomba, y que Ríos llamó al colegio para obtener más información, pero no obtuvo respuesta. 

Según Ahumada, la fiscala solicitó y la jueza concedió el allanamiento y la detención basándose en este breve llamado telefónico como único indicio. Además, mencionó que intentó presentarse en la fiscalía para que Ríos rindiera declaración y evitar su detención, pero solo pudo hablar con un empleado.

Ahumada considera que esta detención es ilegal y un acto de difamación, y argumenta que el Ministerio Público Fiscal debería haber dado la oportunidad al arrestado de dar su versión de los hechos antes de proceder con la detención.

Por otro lado, en la madrugada de ayer, la persona sospechosa de realizar la amenaza de bomba en la sucursal de la Caja Popular de Ahorros, ubicada en la esquina de Juan B. Justo y Gobernador del Campo, fue detenida. Este incidente llevó a la evacuación del edificio y al cierre temporal de la institución bancaria. 

La Fiscalía de Delitos Complejos rastreó el origen de la llamada y localizó al sospechoso, cuyo nombre aún no se ha revelado, y fue arrestado en su casa en Alderetes. Deberá comparecer en una audiencia de formulación de cargos antes de esta noche. 

La Fiscalía solicitó a la Caja Popular que proporcione información por escrito sobre la posible conexión del sospechoso con la entidad, aunque aún no se ha determinado si era un empleado, un deudor, un acreedor u otras posibles razones detrás de la amenaza.

Además, debido al aumento de casos de amenazas de bomba en escuelas y otras instituciones, el fiscal Carlos Picón fue designado para colaborar con Rivadeneira en la investigación, dividiendo las tareas entre ambos investigadores. 

Por otro lado, en las últimas horas, Rivadeneira recibió los informes necesarios para avanzar en la investigación sobre el caso de la falsa alarma ocurrida días atrás en una empresa de correo privado. Hasta el cierre de esta edición, la Fiscalía estaba a la espera de la autorización de un juez para llevar a cabo al menos cinco allanamientos.