30/05/2019

Argentina

Massa estaría más cerca de sumarse a la fórmula del kirchnerismo

El Frente Renovador habilitó a su referente a estudiar un acuerdo con Alberto Fernández y Cristina Kirchner. "Soy consciente de la necesidad de ampliar la coalición", declaró el diputado, quien confrontó con Macri aunque no descartó postularse a la presidencia.
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Massa dijo que está para liderar, pero también para empujar el carro desde donde sea.

El Frente Renovador habilitó este jueves a Sergio Massa a explorar un acuerdo con el kirchnerismo con el objetivo de vencer a Mauricio Macri en las presidenciales de octubre. La compleja decisión fue instrumentada mediante el recurso de derivar la responsabilidad política en una asamblea partidaria, para cubrirla con un ropaje democrático y quitarle a Massa el peso de asumir el acercamiento a una fuerza de la que se alejó con duros cuestionamientos, indicó La Política Online.

Después de un debate que se extendió desde el mediodía, el espacio que lidera Massa presentó su documento final, que sostiene en su párrafo más significativo que "la fragmentación de la oposición sólo beneficia a Macri". En ese sentido, considera que la Argentina necesita "una coalición opositora amplia y plural" para competir en las próximas oposiciones y delega en Massa la decisión de hacer los "acuerdos que crea oportunos" para ganarle a Cambiemos, en un aval explícito para negociar con el espacio de Alberto Fernández y Cristina Kirchner.

En los hechos la asamblea del Frente Renovador invirtió el límite que habían trazado en Argentina Federal, el hasta ahora espacio político que venía integrando Massa. En ese espacio estaban abiertos a alianzas, con la condición de no pactar con el kirchnerismo. Ahora, el Frente Renovador le dice a su líder que converse con todos menos con Macri.

Después de la lectura del documento, mientras sonaban algunos cantos tímidos con el "hit del verano" que insulta a Macri, el tigrense tomó la palabra. "El Gobierno fracasó. No fracasamos los argentinos, fracasó Macri, su gobierno, el supuesto mejor equipo de los últimos 50 años", sentenció. Y reafirmó: "La realidad se impone y habla por sí sola".

"El secreto es construir una coalición opositora amplia, plural y federal. Terminar con este gobierno de pocos y para pocos", pidió. Si bien ratificó su voluntad de "liderar", confesó: "Estoy para empujar el carro desde donde sea".

Finalizado el congreso, el clima entre los legisladores, intendentes y dirigentes del FR era triunfalista. Es que la gran mayoría de quienes participaron en la cumbre hicieron un pedido de ampliar, que finalmente desembocó en abrir la negociación con el kirchnerismo. "Ahora la pelota está en cancha de ellos", dijo a LPO uno de los armadores más importantes del espacio.

Massa agradeció las distintas posiciones expresadas y manifestó que “el Frente Renovador es el tábano de la política argentina que quiere ser protagonista”. Inició su discurso con un repaso de las cifras económicas del macrismo y recordó indicadores como la mayor inflación en 27 años, la desocupación que roza los dos dígitos y los índices de pobreza.

“El gobierno de Macri fracasó, apostó a la timba financiera en vez de a la producción y el trabajo, los históricos motores de la Patria”, lanzó enfervorizado. “Eligió un mal camino, lo más grave es que engañó y mintió a los argentinos”, recalcó el ex intendente de Tigre, para quien el Gobierno “mintió y “atrás de la mentira esconde su insensibilidad, es incapaz de ver el dolor y el sufrimiento de los argentinos”. Y que además “no reconoce errores ni hace autocrítica” luego de un gesto “irresponsable” como el acuerdo con el FMI, que “hipoteca el futuro de todos con una deuda de 187 mil millones de dólares”.

Además, sostuvo que es un gobierno “mezquino” que “lucra con la polarización y a puesta a la grieta”. Para Massa, “nadie puede dividir a una sociedad para ganar una elección y después querer gobernar para todos”. En ese sentido, Massa dijo que “no somos anti Macri ni anti Cambiemos, nos duele el presente y no queremos que todo vaya a peor”.

De cara a la campaña electoral, manifestó que “el país se merece otro futuro y tenemos la vocación para construir una nueva mayoría, porque queremos ser alternativa de gobierno y tenemos esa vocación”. Por eso, afirmó que “no podemos permitirnos un nuevo fracaso, otros cuatro años que destrocen el tejido social” en el marco de una “situación límite”.

Por eso, aseguró que “el próximo gobierno deberá dar respuestas al presente y al futuro y precisará un enorme acuerdo político y social”. Añadió que “creo en la diversidad y en la búsqueda de consenso”, en un guiño al kirchnerismo, aunque lanzó un tiro por elevación al decir que “unos eligen a dedo, nosotros escuchamos opiniones; nos vienen apurando a fuerza de rumores y especulaciones, me buscan cargos y yo no los necesito para expresar mis ideas”.

En el final de su discurso llamó al escenario a los dirigentes de su fuerza y remarcó que el documento del Congreso partidario “muestra la diversidad y la firme voluntad de construir una mayoría opositora para ser alternativa a un gobierno de fracasos”. Pidió a “los dirigentes opositores” que “abandonen la vanidad y piensen en el país que quieren construir” y que llegado el caso “yo estoy para liderar, pero también para empujar el carro desde donde sea, porque tenemos la responsabilidad de reconstruir la Patria”. Llamó a mostrar un programa de gobierno y a “construir una mayoría que termine con un gobierno para pocos y hacer un gobierno para todos”. (LPO; Página/12)




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