Caso Fernando Báez Sosa: los rugbiers afrontan la vida en prisión con visitas y atención psicológica en la previa al traslado definitivo

Los ocho condenados por el asesinato de Fernando Báez Sosa continúan compartiendo el mismo pabellón en la Alcaidía N°3 de Melchor Romero después del veredicto del lunes pasado. A pesar de los informes de que se encontraban separados, altas fuentes aseguran que esto es falso. 

Los psicólogos visitan a los condenados a diario, lo cual es común para los condenados que enfrentan sentencias largas. Los detenidos también han recibido visitas de sus familiares y amigos en la última semana. 

Aunque su situación actual no ha cambiado mucho, se espera que sean trasladados a diferentes prisiones en el futuro cercano. Este traslado presenta un desafío para el Servicio Penitenciario Bonaerense, y el "ensañamiento mediático" ha tenido un impacto negativo en los detenidos. 

Thomsen fue el único de los acusados que habló sobre sus días en la cárcel, en su monólogo ante la fiscal del caso en febrero de 2020.

Los ocho condenados por el asesinato de Fernando Báez Sosa se mantienen en el mismo pabellón de la Alcaidía N°3 de Melchor Romero, donde se encuentran desde hace más de dos años. 

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Si bien su vida cotidiana no ha cambiado mucho, los presos han sido visitados por psicólogos y familiares en la última semana, según fuentes penitenciarias. 

A pesar de los rumores que han circulado acerca de su supuesta separación para proteger su integridad física, altas fuentes han negado estas afirmaciones. 

A medida que el tribunal se prepara para ordenar su traslado a distintas cárceles, el Servicio Penitenciario Bonaerense enfrenta un desafío en la tarea de alojar a los condenados por el crimen más resonante de la última década en un sistema penitenciario que está hacinado y sobrepoblado. 

El penal de Campana podría ser el lugar ideal para albergarlos, pero la realidad es que este lugar está también sobrepoblado.